RELACIONES CUBA-EUA, REPERCUSIONES ECONÓMICAS

Después de 55 años de bloqueo económico, Estados Unidos y Cuba podrían reanudar sus relaciones comerciales, financieras y de inversión, lo que ayudará a la aceleración de la economía norteamericana y representará un boom económico para Cuba. Son tantas las necesidades insatisfechas, que la economía cubana tendrá su mejor época de desempeño si los aspectos finos de la negociación con respecto a las normas, reglamentos y leyes sobre inversión productiva, financiera y comercial son las correctas.

Con 11 millones de habitantes y una fuerza laboral de 5 millones, Cuba tiene un gran potencial productivo y una población hambrienta de bienes y servicios de calidad a precios competitivos, incluso alimentos. Las incipientes reformas económicas iniciadas en el 2011 para comenzar a tener operaciones de libre mercado en cuanto a compra y venta de autos, celulares, computadoras y bienes raíces deberán ser reforzadas si quieren sacar provecho del desbloqueo comercial con Estados Unidos. El anunció del año pasado para instrumentar un mercado cambiario dual (dos precios para el dólar), promete promover el turismo y el gasto en otros bienes y la posibilidad de establecer relaciones interbancarias con los bancos de Estados Unidos abre una enorme oportunidad para las transacciones comerciales.

De acuerdo con el World Factbook de la CIA, durante el 2012 Cuba fue la economía numero 68 a nivel mundial en cuanto al Producto Interno Bruto (PIB) en paridad de poder de compra, el cual fue de 121 billones de dólares, lo que representa apenas el 6.6% del PIB de México medido en los mismos términos. Su nivel de vida se mantiene por debajo del que tenían anteriormente al colapso de la Unión Soviética, y en materia de crecimiento económico en términos reales (sin inflación), se encontró en el lugar 112 a nivel mundial.

Los principales riesgos para Estados Unidos pueden presentarse en relación a la cuestión migratoria, pues las oportunidades actuales en la Isla son muy limitadas y el período para ver grandes resultados en materia de empleos no es, desde luego, inmediato, sin embargo el gobierno norteamericano se ha adelantado determinando un cierto número y tipo de visas para evitar una migración masiva hacia su territorio.

Sin duda es una relación ganar-ganar para las dos economías, pero el que tendrá el mayor provecho será Cuba, porque ¡al que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija!

Para el caso de México y de acuerdo con los expertos, el impacto principal será en materia turística, impacto de carácter negativo que recaerá principalmente en la península de Yucatán, en especial Cancún y la Riviera Maya, ya que Cuba cuenta con hermosas playas a un precio más económico lo que no solo atraerá turismo norteamericano, sino europeo y asiático.

En segundo lugar habrá mayor competencia para aquellos empresarios mexicanos que tienen comercio con Cuba, aunque dicho comercio ha sido muy poco, pues sólo el 0.06% de nuestras exportaciones no petroleras se dirige a aquel país y, adicionalmente, ha tenido un comportamiento muy volátil e inestable (sin reflejar una tendencia clara de crecimiento), por ello ésta puede ser una gran oportunidad para aprovechar las ventajas de un mercado de bienes de consumo sediento por tecnología, moda e innovación a bajo precio, así como frutas, verduras y carnes.

La otra ventaja para México se deriva del probable beneficio en materia de crecimiento económico para Estados Unidos, pues como ya sabemos la dinámica económica de nuestro país esta estrechamente ligada a la norteamericana, si ellos crecen, nosotros creceremos también.

Sacar provecho de ello dependerá de la velocidad para iniciar las negociaciones empresariales, aunque es importante recordar los riesgos políticos y económicos que se corren al negociar con una economía calificada por la CIA como comunista y que puede tener la prerrogativa, como tantas otras, de expropiar, embargar, confiscar o incautar empresas y productos. La cautela es importante, y para ello los contratos comerciales deben estar correctamente blindados.

Reservas Internacionales ¿Para qué sirven?

El lunes 8 de diciembre el Banco de México anunció que subastará 200 millones de dólares diarios de sus reservas internacionales, siempre y cuando el precio del dólar sobrepase un incremento del 1.5% respecto al precio del día anterior. El solo anuncio de ésta medida generó mayor confianza en el peso en México y permitió al dólar cerrar sobre los $14 pesos con 34 centavos dicho día.

El nivel actual de las Reservas Internacionales es de 192 mil 365 millones de dólares, un nivel históricamente alto. Y la última vez que el Banco Central utilizó el mecanismo fue durante la crisis financiera del 2008 para inyectar dólares en el mercado y lograr que su precio se reduzca.

Durante el 2008 vendió 15 mil millones de dólares y en 2009 16 mil 200 millones y con ello logró bajar el precio del dólar de $15.25 pesos a $ 13.50, posteriormente y mediante intervenciones esporádicas el precio se colocó en $12.25 en abril del 2010.

Las Reservas Internacionales son un instrumento fundamental de la política cambiaria en México, dicha política se concentra evitar una fuerte volatilidad del tipo de cambio (del precio del dólar en términos de pesos) que permita la fluidez en las transacciones comerciales y financieras internacionales.

La política cambiaria se caracteriza por intervenciones en el mercado donde se compran y venden divisas (monedas extranjeras) que es lo que conocemos como mercado de cambios.

Las reservas internacionales se incrementan cuando el Banco de México las compra a Pemex e intermediarios financieros y disminuyen cuando vende dólares.

Dichas reservas no se encuentran en una bodega inactivas, en realidad se invierten a corto plazo en instrumentos financieros como bonos de otros gobiernos, ejemplo de Estados Unidos, Japón o del Banco Central Europeo. La idea principal es que generen rendimientos y a la par se pueda disponer de ellas en los momentos que se requieran.

En pocas palabras las Reservas Internacionales son propiedad del Banco de México y operan como una especie de aval que genera confianza en los inversionistas internacionales cuando deciden comprar bonos de deuda pública del gobierno mexicano, otorgar préstamos a los bancos, particulares y empresas residentes en México, o realizar inversión extranjera directa e indirecta. Por ello no pueden ser utilizadas para pagar la deuda externa ni de privados ni de gobiernos estatales, municipales e incluso del gobierno federal. Para ello tendría que generarse un superávit fiscal y con ello comprarle los dólares al Banco de México.

Pemex es el principal proveedor de dólares para el Banco de México. Por ley, PEMEX no las puede vender en el mercado de cambios porque, dada la magnitud de sus operaciones, ello generaría una alta volatilidad del precio del dólar, por ello tiene una cuenta corriente con el Banco de México y dicho banco a cambio de los dólares le deposita pesos para que realice sus pagos de nómina, materia prima etc. En promedio el 70% de las Reservas Internacionales que posee el Banco de México han sido compras a Pemex.

El propósito de acumular reservas es para, en casos de inestabilidad, financiar directamente un desequilibrio de la balanza de pagos, intervenir en el mercado de cambio para estabilizar el precio del dólar, poder ser vendidas a los intermediarios para liquidar su deuda externa y sobre todo mantener la confianza sobre el peso mexicano.

Las intervenciones son de dos tipos: directas e indirectas. En las intervenciones directas el Banco de México, por instrucción de la comisión de cambios compra o vende dólares a un precio determinado con el objetivo de lograr la estabilidad del precio del dólar. En las intervenciones indirectas el Banco de México subasta dólares, de forma que, como en toda subasta, el precio lo determinen los compradores:instituciones bancarias y financieras no bancarias.

De esta forma pretende influir en las expectativas que tienen las personas sobre la depreciación del peso, desincentivando la compra de dólares y buscando lograr un tipo de cambio (precio del dólar en términos de pesos) más estable y acorde a las condiciones económicas del país.

Ello nos dice que el Banco de México interviene en el mercado cambiario siempre que considera que la depreciación del peso está ocasionando problemas en balanza de pagos y efectos sobre la inflación. Sobre todo porque en México cerca del 80% de nuestras importaciones son de materia prima, maquinaria y equipo de trabajo, lo que significa que al depreciarse el peso, se dispararían los costos de producción y con ello la inflación, pues por cada dólar de producto importado tendríamos que pagar una mayor cantidad de pesos.

Sin embargo la historia demuestra que en caso de una pérdida de confianza en el peso, o de un ataque especulativo al peso "no hay nivel suficiente de reservas internacionales que pueda evitar las depreciaciones abruptas".

DISCRIMINACIÓN LABORAL DE LA MUJER EN MÉXICO

Nunca como antes tantas mujeres habían participado en la fuerza laboral a nivel mundial, de 1980 al 2008 se duplicó el número de mujeres que trabajan. Sin embargo, según el Informe Global de la Brecha de Género del 2014 tendremos que esperar 81 años para que exista paridad de género en el lugar de trabajo, es decir hasta el año 2095; Y la brecha más amplia está en participación y oportunidad económica, es decir: nivel salarial, liderazgo en la empresa y participación en puestos directivos.

La discriminación laboral de la mujer se relaciona con sus condiciones laborales: menor remuneración por trabajo igual o similar, techos de cristal (obstáculos difíciles de detectar para ascender en el empleo), segregación ocupacional (situación por la cual un grupo determinado de personas ocupa la mayor cantidad de puestos de trabajo o empleos), hostigamiento y acoso.

De acuerdo con el Boston Consulting Group “si las mujeres y los hombres participaran igualmente como empresarios, el PIB mundial podría incrementarse de forma adicional en un 2%, lo que representa 1.5 billones de dólares, sin embargo a nivel mundial las mujeres poseen 40% menos negocios que los hombres y solo el 11% en el mundo inician un negocio propio.

Por otro lado solo el 9% de los directores generales de empresa son mujeres y sólo el 5% de las mujeres tiene un puesto de alta dirección.

Para el caso de México, en igualdad de género ocupamos el lugar 80 a nivel mundial de un total de 142 países y en materia de equidad en salarios para trabajos similares, ocupamos el lugar 116 mientras que para la igualdad en términos de ingresos ocupamos el 114 lugar.

Se estima que en México el 37% del PIB es generado por mujeres y su tasa de participación laboral es del 48%. A pesar de su gran participación económica el 45% de las mujeres que trabajan no tienen acceso a los servicios de salud, el 35% no tiene prestaciones, 44% no tiene un contrato de trabajo por escrito, 51% trabajan en el sector informal, 25% tiene un trabajo de medio tiempo (contra el 8.2% de los hombres) y el 15% ha sufrido discriminación, principalmente de despido por embarazo, reducción de sueldo, además de que se les exige presentar certificado de no embarazo.

Las mujeres en México ganan entre un 5% y un 33% menos que los hombres dependiendo del sector económico en el que se desempeñan.

De acuerdo con el índice de discriminación salarial entre la población subordinada y remunerada, la mayor discriminación salarial contra las mujeres se encuentra entre los trabajadores industriales, artesanos y ayudantes, en dicha actividad la mujer gana 30% menos que los hombres, en los operadores de transporte la diferencia salarial es del 24%, en el comercio 17%, entre profesionistas y técnicos 15%, entre funcionarios y directivos 14% y entre oficinistas 10%. La menor discriminación ésta entre las trabajadoras de la educación.

Y para aquellos que piensan que en México nadie gana el salario mínimo, el 51% de las mujeres que trabajan ganan menos de dos salarios mínimos, de las cuales el 21% ganan cuando mucho un salario mínimo.

El número de mujeres jefas de familia en México se ha incrementado en un 30% del 2005 al 2014, y se espera que para el 2020 el incremento sea del 52%. 1 de cada 4 hogares es encabezado por una mujer y la mitad de dichos hogares son de familia ampliada, en el 80% de esos hogares la mujer no tiene pareja pero sí hijos, y 1/3 de los hogares tiene un solo perceptor de ingresos.

Para concluir la mujer trabaja de 10 a 12 hrs. más a la semana que el hombre porque tiene una doble jornada de trabajo: dentro y fuera del hogar y el 75% de las actividades domésticas las realizan mujeres. La mujer destina el 70% de sus ingresos a la familia y la comunidad mientras que el hombre solo destina el 35%.

Como podemos observar aún hay mucho que hacer en materia de políticas públicas laborales para lograr la igualdad entre hombres y mujeres, y mucho más y mejor información recabada por las encuestas de discriminación, y las realizadas en los hogares, entre otras.

DEL PORQUE LOS MEXICANOS SOMOS TAN FELICES

El 26 de noviembre término el Foro Internacional de Políticas de Bienestar y Desarrollo. Durante tres días tuvimos la oportunidad de escuchar 60 ponencias de grandes personalidades que se dedican al estudio del bienestar y el desarrollo. En el foro hubo representantes de diversos países como Bélgica, Holanda, Italia, Suiza, Bután, Estados Unidos, Dinamarca, Canadá, Reino Unido, Suiza, Argentina, Chile, Colombia, Ecuador. etc.

Personalidades como Leo Bormans denominado Embajador Global de la Felicidad y la Calidad de vida, Jeffrey Sachs, Bruno Frey etc. nos asombraron con los resultados de sus investigaciones. Realmente fue un Foro de Calidad Mundial, perfectamente organizado y equilibrado.

Pero lo que más me llamó la atención fueron las ponencias del modulo referente al ¿Por qué los Mexicanos somos tan felices?, si el 47% de la población es pobre, el 48% de los nacidos pobres se quedan pobres (inmovilidad social), se ha deteriorado la calidad del empleo, y la vida se ha precarizado. Adicionalmente y con respecto al Índice de Desarrollo Humano disminuimos de nivel al pasar del lugar 68 en el 2013, al lugar 71 a nivel mundial en este 2014.

De acuerdo con los estudios presentados en el foro, resulta que en la sensación de bienestar y felicidad de los Mexicanos, las emociones tienen un papel más importante que los ingresos y el trabajo, sin dejar de considerar que existe una correlación positiva entre mayor ingreso y mayor sensación de bienestar; pero el Mexicano le da un mayor peso a la estabilidad familiar, el apoyo que recibe de su pareja, la convivencia con sus amigos y vecinos, y la libertad de poder construir una ruta biográfica propia.

En México la gente es más feliz porque sus conexiones sociales son más acogedoras, lo que supone un capital social mayor, adicionalmente somos más intensos en nuestras emociones, entusiastas, alegres y optimistas. El uso que le damos al tiempo libre también es fundamental, salir con los amigos, ir al cine, a las fiestas, al parque o simplemente charlar en la calle con los vecinos, genera una sensación de bienestar más perdurable que la que puede generar un incremento en el salario, una promoción en el trabajo, o la compra de un automóvil nuevo.

En una escala de satisfacción con la vida del 1 al 10, los mexicanos se auto ubican en el 8.5 y solo 1 de cada 6 se siente poco satisfecho con su vida, mientras que el 82.3% se siente satisfechos o muy satisfechos. De acuerdo con los ponentes la intensidad de las relaciones familiares, la comprensión, la forma de resolver los conflictos internos y el soporte emocional que se dan entre sí los miembros, es un factor fundamental.

En el Reporte Mundial de la Felicidad del 2013, ocupamos el lugar 16 a nivel mundial, y variables determinantes en ello fueron el soporte social (amigos, familiares, vecinos), y la generosidad.

En Estados Unidos por el contrario la Felicidad ha disminuido en promedio porque se ha incrementado la soledad, la inestabilidad de las familias, la desconfianza, las relaciones humanas son más difíciles, ha decrecido el contacto social, la honestidad, la solidaridad, y la participación social, y la gente recurre al mercado (compras) para llenar su vacío social.

Todos los investigadores que hablaron llegaron a la misma conclusión, la sensación de bienestar y la felicidad dependen fuertemente de nuestra convivencia social, las relaciones con la pareja y la familia y la percepción de que podemos controlar nuestra vida.

Felicidades a los organizadores del evento, esperamos que la experiencia se repita año con año y que Guadalajara se reconozca a nivel mundial como la ciudad que organiza el Foro Internacional de Políticas de Bienestar y Desarrollo, así como lo hace con la Feria Internacional del Libro.

¿POR QUÉ LA EXPANSIÓN DE OFERTA MONETARIA EN ESTADOS UNIDOS NO GENERÓ INFLACIÓN?

El 24 de octubre de este 2014 la Reserva Federal puso fin a seis años de estímulos monetarios a través de inyectar liquidez en el mercado comprando deuda privada, pública y activos financieros tóxicos a las instituciones financieras bancarias y no bancarias, e incluso mediante el salvamento de instituciones no financieras. Su objetivo era evitar la sequía del mercado financiero y crediticio generado por la crisis de confianza que detonó la denominada Crisis Sub-prime.

La crisis iniciada en 2007, pero enfrentada hasta 2008 con la quiebra de Lehman Brothers, generó tal pánico financiero que en muy poco tiempo interrumpió el crédito bancario, tanto entre bancos, como hacia el publico en general, durante dicho período el crédito bancario llegó a caer un 8% en su peor momento (el cuarto trimestre del 2009), ello paralizo prácticamente a la económica norteamericana iniciando la denominada "Gran Recesión", la peor crisis económica desde la Gran Depresión de 1929.

La idea principal de la Reserva Federal (banco central) fue dotar de liquidez a las instituciones financieras bancarias y no bancarias para reactivar el crédito bancario hacia la inversión productiva y el consumo, y disminuir las tasas de interés para hacer rentables los proyectos productivos. El objetivo final: lograr el crecimiento económico y la recuperación del empleo.

Así el agregado monetario M1, que representa la cantidad de billetes y monedas en circulación, más los depósitos en cuenta corriente de la banca comercial creció un 189% de noviembre del 2008, cuando inicia la expansión monetaria, a octubre de 2014 cuando finaliza, es decir un 31.5% promedio anual. Mientras que en el mismo período el Producto Interno Bruto apenas creció 1%.

Durante este periodo instrumentó tres paquetes de estímulo monetario denominados facilidades cuantitativas “Quantitative Easing” (QE) que representan un instrumento no convencional de política monetaria que opera cuando la reducción de las tasas de interés de referencia u objetivo (Tasa a la que otorga crédito a la banca comercial) no genera reacción, y las operaciones de mercado abierto son insuficientes. Así realizó en total tres programas: QE1, QE2 y QE3 con una inyección de liquidez total de 4.21 billones de dólares.

La pregunta que un querido amigo me hizo al respecto es ¿Por qué tanta inyección de liquidez no generó inflación? y la respuesta consta de dos partes, la primera es la siguiente: las empresas y familias norteamericanas estaban sobre endeudadas, por lo que no deseaban obtener más créditos, ello hizo que las instituciones financieras bancarias y no bancarias que recibieron dicha liquidez, buscarán colocarla con mayores rendimientos en los mercados financieros internacionales, en particular en las economías emergentes como México, Brasil, India, Rusia etc, que ofrecían mayores rendimientos y tasas por dichos recursos, ello generó otro tipo de inflación a la que los economistas le llamamos “inflación financiera” y se refleja en la volatilidad y elevado crecimiento del precio de los activos financieros detectados por los índices de precios y cotizaciones de las bolsas de valores en dichos países.

La segunda es la existencia de la denominada "brecha del producto", que no es otra cosa que la diferencia existente entre la capacidad productiva de una economía o PIB potencial y el PIB real (crecimiento realmente logrado en el período), dicha brecha del producto para Estados Unidos ha sido negativa desde el 2008 hasta la fecha, indicando que las empresas están operando con mucha capacidad instalada ociosa debido a la crisis y no han logrado recuperar los niveles de producción previos a la misma, como el consumo de las familias y la inversión productiva cayó sustancialmente, eso permite absorber el impacto inflacionario del excedente monetario sin generar presiones sustanciales en los precios.

El desempleo sigue siendo elevado, el consumo muy bajo y las empresas no pueden darse el lujo de subir los precios, por ello los mantienen. Al no tener incentivos para ampliar la producción los empresarios prefieren mantener la liquidez en sus hojas de balance que utilizarlo para la producción; es decir el dinero se ha quedado ocioso, sin circular, lo que ha retrasado la recuperación económica, sin embargo la gran cantidad de dinero circulante comienza a reactivar la expansión.

GUERRA DE PRECIOS INTERNACIONALES DEL PETROLEO PODRÁN HACER INEFECTIVA A LA REFORMA ENERGÉTICA

En el último mes el precio internacional del petróleo se ha reducido a su nivel más bajo en los últimos cinco años. La mezcla mexicana se cotizó al día de hoy, 21 de octubre, en 77 dólares con 63 centavos, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) cotizó 82.82 dólares y el Brent 86.22.

La explicación radica en que hoy el mercado petrolero internacional es el más profundo y líquido desde 1951, con un incremento en la producción mundial del 7% tan sólo en lo que va de éste 2014.

Las razones principales tienen que ver con la mejora en la infraestructura, la tecnología y la producción de energías renovables y no contaminantes como son la eólica, la mare-motriz, la geotérmica, la hidráulica, la solar y la biomasa entre otras. Adicionalmente Estados Unidos está desarrollando tecnologías que han elevado la producción de oil shell y gas shell. Todo ello ha generado un exceso de oferta energética que se ha sumado a la caída en la demanda por la desaceleración económica de dos gigantes: China y la Unión Monetaria Europea.

Los analistas se han cuestionado también si no estamos en el umbral de una guerra de precios, pues los países exportadores de petróleo miembros de la Organización de Países Exportadores de Petroleo (OPEP) no parecen estar interesados en reducir la extracción de crudo para contrarrestar la caída en los precios internacionales, e incluso han llegado a suponer que quizás están dispuestos a dejar caer aún más los precios para hacer quebrar a las empresas pequeñas y medianas en Estados Unidos que extraen gas y petróleo de lutita (atrapado en las rocas) denominado gas shell, y que ha reducido las importaciones de dicho país en aproximadamente un 30%.

Hoy éste país produce 65% más petróleo que hace cinco años e importa 3 millones 100 barriles menos por día y el shell gas constituye más del 50% de la producción total de gas. La Agencia Internacional de Energía estima que para el 2018 Estados Unidos será energéticamente independiente, con las implicaciones que ello pueda tener para México.

Esta caída en los precios del petróleo genera problemas de presupuesto público para países como Yemen, Irán, Venezuela, Nigeria, Ecuador, Lybia, Irak, Rusia y Omán entre otros, ya que el costo de producción de sus barriles de petróleo supera los 93 dólares por barril, y ni que decir para México cuyo costo se ha elevado debido a la disminución en la productividad de los pozos petroleros.

En México la producción total de hidrocarburos del 2003 al 2013 disminuyó un 24%, la de hidrocarburos líquidos cayó un 25%, la de petróleo crudo un 58%; mientras que nuestras exportaciones petroleras se han reducido un 35%. Paralelamente el precio de la gasolina magna en dicho período se ha elevado un 93%, de la premium un 81%, de la turbosina un 311.04% y del diesel un 140.4%. La razón es simple, el precio del barril de petróleo se cotiza en el mercado internacional, mientras que los precios de la gasolina son precios administrados, es decir determinados por el gobierno para tratar de cubrir su déficit fiscal ante la baja recaudación de impuestos. Además no debemos olvidar que desde hace más de 30 años, 30 centavos de cada peso que ingresa al gobierno federal proviene de Pemex.

Para México las consecuencias de la caída de los precios del petróleo son similares, de forma que podría darle al traste a la Reforma Energética, que se concentró básicamente en dos fuentes de energía: hidrocarburos y eléctrica, y ésta caída en los precios aunado a los costos de extracción del crudo de aguas profundas y de pozos cada vez menos productivos reduce notablemente la rentabilidad para los posibles inversionistas nacionales y extranjeros que quieran participar en la extracción, refinación y distribución del petróleo, por el hecho de que en nuestro país se reduce la producción de la principal fuente de energía.

El otro problema es que el consumo energético de la economía en su totalidad se esta elevando por encima de la producción energética y en el 2020 tendremos un déficit estructural de energía.

Otros países están trabajando en el desarrollo de fuentes energéticas renovables y no contaminantes. En Brasil por ejemplo el 80% de la producción de energía es Hidráulica, mientras que en México es del 12.30% (el promedio mundial es del 16.10%), con respecto a la energía eólica en España es el 14.56% del total y en México del 0.56% (el promedio mundial de 1.96%), para el caso de energía solar las cifras son España 2.98%, México 0.01% (promedio mundial 0.29%), la energía bioenergética es del 7.11% en Chile y en México del 0.85% (promedio mundial 1.65%).

Creo que es urgente y necesario completar el paquete de leyes secundarias que impulsen la inversión y producción de energías renovables y verdes si no queremos quedar fuera de la jugada en el escenario energético de la próxima década. Nos hemos desgastado demasiado con una reforma energética en hidrocarburos que no sólo llega tarde al escenario, sino que además no podrá operarse si los precios internacionales del petróleo siguen cayendo.




LOS RIESGOS QUE VIENEN PARA 2015 Y EL ENDEUDAMIENTO EN DOLARES

El día de hoy quiero hablar sobre los riesgos de endeudarse en otras monedas, en especial en dólares. Las tasas de interés a nivel internacional han permanecido muy bajas en los últimos cinco años, debido a las políticas públicas de expansión monetaria de los principales bancos centrales a nivel mundial. El objetivo es generar un impulso en el crédito, la inversión y la demanda, lo que debe impulsar el crecimiento económico.

Sin embargo toda crisis financiera, bancaria, de endeudamiento externo o de tipo de cambio, comienza con el mismo fenómeno: el sobre-endeudamiento de empresas y personas por un exceso de confianza con respecto a que las condiciones se mantendrán de forma positiva por tiempo indefinido.

El problema es que en México el endeudamiento en dólares de las empresas no financieras ha crecido aceleradamente en los últimos seis años, siendo actualmente de 119 mil millones de dólares. Esta es la tasa de endeudamiento privado en moneda extranjera más alta de nuestra historia. Y tan solo en el segundo trimestre de éste 2014 creció un 24.2% a tasa anual, y en los últimos seis años se ha duplicado. Por otro lado y en el mismo período las tasas de interés en los mercados internacionales se han mantenido muy bajas y las empresas llegan a creer que dicha condición permanecerá por mucho tiempo.

Durante el primer semestre de éste 2015, la deuda de los corporativos creció en 7 mil 600 millones de dólares lo que refleja una velocidad preocupante, mientras que la inversión extranjera indirecta o de cartera (IEC), realizada en el mercado de valores y de dinero, sumó 33 mil 157 millones de dólares. Por su parte las exportaciones muestran una clara disminución en su tasa de crecimiento anual desde el 2010. Si sumamos la deuda externa privada y la deuda externa pública tenemos una deuda externa sin precedentes de 313 mil 655 millones de dólares, muy por encima de nuestras reservas internacionales y el nivel de exportaciones totales, lo que nos pondrá en un aprieto ante la falta de divisas para liquidar dicha deuda.

Lo que ello significa es que la diferencia de velocidades entre las tasas de crecimiento de la deuda privada y pública externa, la inversión extranjera de cartera o de corto plazo y las exportaciones, están abriendo una brecha en la disponibilidad de divisas que, ante un incremento en las tasas de interés internacionales, provocará una abrupta salida de capitales (IEC) o "vuelo a la calidad" que generará una significativa escasez de divisas provocando una depreciación (devaluación) del peso.

Los empresarios desconocen los riesgos de la volatilidad financiera que se espera para el próximo año ante el retiro del estímulo monetario por parte de la Reserva Federal y el comienzo de la venta de activos financieros tóxicos a precios de descuento para sanear su balance, mejor conocido como proceso de des-apalancamiento. Ello generará un incremento en las tasas de interés internacionales a nivel mundial, cosa que el FMI y el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero en México ya han pronosticado en sus últimos informes, lo que hará disminuir el precio de los activos que operan como colaterales (respaldo o subyacentes) y pondrá en dificultades a las empresas para pagar sus deudas o refinanciarlas.

Se espera que dicho incremento en tasas hará emigrar capitales golondrinos del país, lo que motivará una depreciación sensible en el peso, y el incremento del peso financiero de dicha deuda, sobre todo porque las empresas no tienen coberturas cambiarias y sus ingresos son fundamentalmente en pesos, no en dólares.

Por ello la recomendación para los empresarios que se han endeudado en dólares es la compra de coberturas cambiarias, ello permitirá diluir los riesgos y el costos financiero de la deuda en caso de cumplirse el pronóstico de depreciación del peso.


COMERCIO A NIVEL MUNDIAL: ¿NEO-MERCANTILISMO?


En un informe reciente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) establece que el Comercio entre el Grupo de los siete (G-7) se mantiene estable, pero en la eurozona, existe más bien un estancamiento tanto de las exportaciones, como de las importaciones, con débiles tasas de crecimiento que no superan el 1% (http://www.oecd.org/std/its/international-trade-statistics-trends-in-second-quarter-2014.htm).


Alemania, el país más fuerte dentro de la zona, apenas tuvo un crecimiento del 0.5% de sus exportaciones y sus importaciones decrecieron -1.3% durante el segundo trimestre del año. Francia, el segundo país más fuerte presentó un decremento de sus exportaciones del -0.6% y en sus importaciones del -0.2%. Para China, líder en el comercio mundial, las exportaciones apenas crecieron un 2.9% mientras que las importaciones cayeron un -4.1%.

De acuerdo con los datos, el comercio exterior permanece estancado desde el 2010, y no logra recuperar los niveles pre-crisis, los países desarrollados y en desarrollado han establecido nuevas barreras al comercio internacional y buscan favorecer sus exportaciones y obstaculizar sus importaciones, es a lo que se le ha llamado el momento neomercantilista.

El mercantilismo fue una corriente de pensamiento económico que prevaleció de 1500 a 1750 (Siglo XVI, XVII y primera mitad del XVIII) coincidente en Europa con la monarquía absoluta, que suponía que lo que una nación ganaba vía comercio exterior, otra lo perdía. Por ello proponía obstáculos a las importaciones y promover las exportaciones, para tener una balanza comercial favorable que atrajera oro de otros países (en aquella época las monedas eran de oro y plata) y así sustraer la riqueza de otros países. También proponían el colonialismo de las regiones subdesarrolladas del mundo para extraer sus riquezas naturales y venderles productos manufacturados.

La idea era tener un mercado interno fuerte y una nación poderosa mediante un fuerte intervencionismo del Estado en la Economía. Se trataba de proteger la producción nacional de la competencia internacional subsidiando a los empresarios nacionales y creando privilegios monopolistas.

Éste fenómeno Neo-mercantilista obstaculiza el comercio exterior a nivel mundial, por lo que es difícil que, en conjunto, las naciones logren un mayor crecimiento económico pues se han generalizado los obstáculos proteccionistas y neo-proteccionistas a las importaciones. Entre los obstáculos se destacan las barreras no arancelarias como son los permisos de importación, las cuotas, las reglas fito-sanitarias, ecológicas y en pro de la salud, mientras que por otro lado intentan promover sus exportaciones.

La idea principal es evitar el déficit comercial y crear un superávit para evitar el endeudamiento en otras divisas, ya que la inestabilidad financiera internacional ha generado una fuerte volatilidad de las monedas (tipo de cambio) que sumada a el incremento de las deudas públicas entre los países más afectados por la crisis financiera-económica del 2008, ha generado un creciente déficit fiscal. La idea final es promover el crecimiento económico basado en el mercado interno y la competitividad a través de una mano de obra barata y capacitada. Así los gobiernos se están preocupando por atraer capitales abaratando sus recursos productivos, flexibilizando los mercados laborales y financieros y generando procesos productivos flexibles, en un mundo global cada vez más integrado, inter-dependiente y abierto a la competencia internacional. El resultado sin embargo no es el esperado, el comercio internacional se estanca, y las medidas proteccionistas y neoproteccionistas se incrementan.

DE LA GRAN MODERACIÓN A LA GRAN RECESIÓN

El 15 de septiembre del 2008 inició uno de los procesos de estancamiento económico mundial más largos de la historia y pasamos de la denominada Gran Moderación a al Gran Recesión y hoy en día al Gran Estancamiento.

La Gran Moderación se concebía como un proceso en que la volatilidad e inestabilidad económica había quedado atrás, el concepto fue acuñado por James Stock de la Universidad de Harvard y reflejaba un elevado optimismo con respecto al control, supuestamente tomado, sobre el ciclo económico. Se pensaba que las crisis económicas profundas y duraderas habían quedado atrás y lo que veríamos en adelante serían pequeños procesos de desaceleración (baches económicos), seguidos de procesos de crecimiento económico moderado. Atrás habían quedado las depresiones y sobrecalentamientos que generaban fuertes problemas de equilibrio económico, deflación o inflación según fuera el caso, desempleo y concentración del ingreso.

Para algunos economistas el éxito consistía en haber controlado la inflación, los Bancos Centrales, encargados de la política monetaria y libres de la dominancia fiscal (la exigencia por parte de los gobiernos nacionales de financiar con emisión monetaria su déficit fiscal) eran los responsables de suavizar el ciclo económico, también influía la liberalización de los mercados que generaba un proceso ordenado de crecimiento económico, el progreso tecnológico con su modelo "just in time", la apertura externa y la globalización e integración de los mercados.

Sin embargo el 15 de septiembre del 2008 la caída de Lehman Brothers detonó una de las peores crísis económicas de la historia, tanto por su profundidad como por su extensión y duración. Como resultado de aquella inestabilidad financiera internacional, el 60% de los países entraron en crisis económica y hoy La Unión Monetaria Europea se encuentra a un paso de la deflación (proceso generalizado de caída de los precios de mercado). Estados Unidos no logra una recuperación plena de su mercado de trabajo, y los Bancos Centrales de las economías desarrolladas tuvieron que modificar totalmente su política monetaria para enfrentar la crisis: la denominada política monetaria no convencional, que rompe con los paradigmas teóricos de la época, generando otro tipo de problemas relacionados con las bajísimas tasas de interés que elevaron los precios de las acciones e han incentivado de nuevo las burbujas bursátiles y la concentración de la riqueza.

La crisis propagada a nivel mundial en el 2008, ha sido la peor crisis de la historia después de la Gran Depresión de principios de los años 30´s. Hoy, la economía mundial muestra un persistente estancamiento económico y no logra recuperar las tasas de crecimiento de los años anteriores a la crisis.

Durante los últimos seis años, hemos vivido prácticamente un estancamiento económico mundial, pues las tasas de crecimiento de los países desarrollados fueron, en promedio, de apenas un 0.9% del 2007 al 2014.

El Riesgo y la incertidumbre han sido la constante al igual que la volatilidad de los tipos de cambio y los precios de los activos financieros, el crédito bancario a nivel internacional no logra recuperarse, y el crecimiento del déficit fiscal para sacar a los países desarrollados de la recesión llevo a la deuda pública del 72.6% al 106% del PIB mundial en promedio.

Todo ello ha generado medidas de ajuste con un alto costo social, la pobreza se ha incrementado, la concentración del ingreso se ha polarizado al igual que la concentración de la riqueza, la inestabilidad social y política se incrementa, y la sociedad se reorganiza bajo un nuevo paradigma.

Se dice que los errores se capitalizan cuando se reconocen y se aprende de ellos, esperemos que se detone el proceso de reflexión sobre las causas de la crisis, se valore adecuadamente su componente ético y de falta de valores morales, y construyamos una sociedad más solidaria, subsidiaria y consiente de que los mercados no pueden operar en un entorno de vacío moral.

ESTUDIAR SI DEJA

Recientemente se publicó el estudio de la OCDE sobre el Panorama Educativo en México 2014 y al respecto se sacaron ciertas conclusiones que a mi modo de ver están equivocadas. La conclusión que más problemas puede acarrear es aquella que dice que “estudiar no asegura tener empleo y que el mercado laboral favorece más aquellos con pocos estudios”.

Estas conclusiones parten de dos datos simples: que la tasa de desempleo más alta están entre los adultos con educación superior 4.6%, mientras que la tasa de desempleo entre los adultos sin educación media superior es del 3.6%. Ello significa que a mayor educación mayor vulnerabilidad.

Hoy la tasa total de desempleo es de 5.47% de la PEA y la tasa de los que tienen un nivel de estudios de educación superior es del 5%, un poco menor que el promedio total y el 40.2% de los desempleados tienen educación media superior y superior.

A pesar de ello creo que dichos datos deben tamizarse. La realidad es que quien tiene menor nivel educativo tiene mucho menos que ofrecer, básicamente su fuerza física que, adicionalmente, esta muy mal pagada ya que dichas personas ganan salarios muy bajos. Por su parte quién tiene estudios superiores ofrece su talento y conocimiento, muy valorado en la actualidad pues presenta mayor flexibilidad para adaptarse a las nuevas tecnologías y capacidad de asimilación de nuevos conocimientos.

Las personas con bajo nivel educativo tiene una muy elevada rotación en el empleo, es cierto que duran poco tiempo desempleadas, pero también es cierto que continuamente son despedidos y sustituidos por otros, no cuenta con prestaciones laborales ni seguridad social y se considera capital humano de fácil reemplazo. En cambio una persona con estudios superiores tiene menor rotación en el trabajo, dura una temporada mayor en el mismo y cuando queda desempleada, tarda más en encontrar un buen empleo porque no esta dispuesta a aceptar cualquier oportunidad si ésta no cubre sus expectativas.

Las estadísticas refuerzan esta conclusión: que a mayor nivel educativo mayores ingresos, y que a mayor número de años de estudio menor es el nivel de pobreza.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) publicó en marzo del 2009 un estudio denominado “México: impacto de la educación en la pobreza rural”, y dicho estudio demuestra que es más fácil escapar de la pobreza cuando se tiene un mayor número de años de estudio. De acuerdo con sus resultados terminar la primaria en el medio rural, reduce la pobreza alimentaria 7.3% (pobreza extrema) y en 8.3% la pobreza de capacidades. En el medio urbano,las personas que concluyen la primaria reducen la pobreza extrema en un 16%, y la pobreza moderada en un 15%, por su parte terminar la secundaria implica la posibilidad de reducir la pobreza extrema en un 25%, y la moderada en un 23%.

Los ocupados con primaria incompleta tienen bajos niveles de salarios, así el 28.5% gana hasta un salario mínimo, mientras que los que tienen estudios de educación media y superior sólo el 5.2% gana el mínimo. Por otro lado de los que tienen primaria incompleta solo el 1.4% gana más de 5 salarios mínimos, mientras que los que tienen educación media superior y superior el 15.1% gana más de 5 salarios. Conforme avanzan en sus estudios tienen mayores ingresos.

El problema en México es que los estudiantes tienden a abandonar la escuela de forma prematura. Solo el 62% de los jóvenes de 16 años están inscritos en educación media superior, el 35% de los jóvenes de 18 años cursan los estudios de media superior y únicamente el 30% de los jóvenes de 20 años están matriculados.

En México los jóvenes que tienen empleo pasan más tiempo trabajando que estudiando. Así los jóvenes de 15 a 29 años pasarán en promedio 6.4 años en actividades laborales y 5.3 en educación y formación. 65% de los jóvenes de 15 a 29 años de edad no estudian y 22% no estudia ni trabaja (NINIS).

Mientras más alto es el nivel educativo más baja es la proporción de jóvenes que no tienen empleo.

El problema residen en el hecho de que tenemos el mayor bono demográfico de nuestra historia, un enorme potencial de talento y capacidad productiva e innovativa humana que se está desperdiciando, y mandamos señales incorrectas, pues les hacemos creer que estudiar no vale la pena.

El otro grave problema es que cada año 1 100 personas llegan a la edad reglamentaria para trabajar (15 años) y en los últimos 19 años solo hemos generado 354 mil empleos formales por año. Ello nos lleva a un enorme déficit de fuentes de empleo, que a la vez presiona a la baja las remuneraciones y la calidad del empleo, y ésto no se encuentra directamente relacionado con el nivel de estudios.

PARA ENTENDER PORQUE EL BANCO CENTRAL EUROPEO ESTA REGALANDO EL DINERO

Los bancos centrales son los únicos que pueden emitir dinero para evitar que haya un exceso de dinero en circulación y se genere inflación, de igual forma se busca evitar un desorden monetario con la existencia de diversas monedas circulando. Adicionalmente son bancos de bancos, por lo que prestan el dinero a la banca comercial para que a su vez, la banca comercial lo preste a empresas, personas y otras instituciones. De esta forma es cómo inyectan el dinero en la economía, la circulación del mismo garantiza a su vez que las mercancías se vendan, la producción continúe y con ella la generación de empleos, los ingresos y el consumo.

Cuando hay demasiado dinero en circulación, la demanda de bienes y servicios se incrementa, y si las empresas no producen lo suficiente para abastecerla se generará inflación. El rápido avance de los precios hace que el dinero mismo pierda su poder de compra, la pobreza aumenta, pero también los costos de producción, pues todos los productos tienen a encarecerse, ello lleva al quiebre de las empresas, la reducción de la producción y con ella el aumento del desempleo, la caída de los ingresos y del consumo de la población, lo que rápidamente se convierte en recesión o en crisis.

Cuando no hay suficiente dinero en circulación, o las personas lo atesoran, se puede generar un proceso deflacionario (caída de los precios), que implica que no hay ventas suficientes para que las empresas coloquen su producción, y por lo tanto la reducirán, generando desempleo y con ello disminución de ingresos y del consumo, retroalimentándose la caída de las ventas; como consecuencia la economía se contrae y de nuevo entra en recesión o en crisis.

Por ello el banco central debe controlar la cantidad de dinero en circulación, y una de las formas de hacerlo es mediante la tasa de interés de referencia que es la tasa a la que el banco central presta el dinero a la banca comercial para que ésta a su vez preste dinero a los agentes económicos: empresas, familias, gobierno. Si el banco central sube la tasa de referencia, la banca comercial deberá subir sus tasas de interés: préstamos, tarjeta de crédito, crédito hipotecario, crédito automotriz, crédito refaccionario etc. De ésta forma, cada que el banco central sube la tasa de interés, la banca comercial subirá las tasas de interés haciendo más atractivo el ahorro y encareciendo el dinero para aquellos que lo soliciten, ya sea porque quieren iniciar un proyecto de producción, comprar bienes, contratar personas etc. como resultado el proceso inflacionario disminuirá o se detendrá.

Pero si el banco central baja su tasa de referencia, lo que espera es abaratar el dinero y motivar a la banca comercial a prestar, a las personas para tomar créditos y préstamos, y así fomentar el uso del dinero y con ello la compra-venta de bienes y servicios, en pocas palabras, dinamizar la economía y evitar la deflación.

Ante el peligro de una deflación el Banco Central Europeo (BCE), que conduce la política monetaria en la eurozona, ha ido disminuyendo su tasa de interés de referencia hasta llegar al increíble 0.05% anual de interés (éste jueves 4 de septiembre), ello significa que presta dinero a la banca comercial a un bajísimo precio, su esperanza es que se reactiven el crédito y los préstamos, y con ello la producción y el consumo de la población y así evitar la caída generalizada de los precios, ya que la tasa de inflación llegó a un mínimo de 0.3% y están en el umbral de la deflación. Adicionalmente, como es banco de bancos, los bancos pueden depositar sus excedentes de dinero en el banco central y obtener un remuneración (tasa de interés denominada facilidad de depósito), pero para evitarlo y lograr que el dinero siga circulando disminuyó la tasa de interés que remunera los depósitos al -0.20% (tasa de interés negativa), es decir que en lugar de pagar, cobrará intereses a aquellos bancos que tengan el dinero ocioso, esto es depositado en la cuenta que mantienen con el BCE.

Su esperanza es reactivar el crecimiento económico para éste año, pues hoy se estima en apenas un 0.9% anual, lo que representa prácticamente el estancamiento de la economía en la zona del euro.

PARA CRECER: DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO

El ingreso de las personas en forma de salarios, rentas, beneficios, utilidades, rendimientos, intereses, depende de la actividad productiva, misma que a su vez genera los bienes o servicios que satisfacen nuestras necesidades, a lo que los economistas llamamos riqueza real.

La venta de los productos permite a las empresas cubrir los costos de producción y con ello generar los ingresos a distribuir entre proveedores, trabajadores, administrativos, etc. En pocas palabras, la fuerza que genera el crecimiento económico, la producción, la riqueza y los ingresos es la actividad productiva generadora de empleos.

Los salarios remuneradores permiten activar la demanda y por ende las ventas. Como bien decía John Maynard Keynes: “La demanda efectiva es simplemente el ingreso global (o importe de ventas) que los empresarios esperan recibir, incluyendo los ingresos que hacen pasar a manos de los otros factores de la producción por medio del volumen de ocupación que deciden conceder” (Teoría General sobre la Ocupación, el Interés y el Dinero”: 52)

En México el Consumo de las familias de 1994 al 2013, representó en promedio el 65% de la demanda total interna, y el 52% de la demanda global (incluyendo exportaciones), lo que significa que son la base del mercado interno. Si sus ingresos salariales son deprimidos, las ventas de las empresas también lo serán, y con ello la producción y la creación de empleos, lo que genera un círculo perverso de bajo poder de compra, bajas ventas, baja producción, bajo empleo y bajo poder de compra: la economía se va comprimiendo sobre sí misma, sobre todo si reconocemos que el 62.5% de los ingresos de las familias provienen de trabajo subordinado (salarios), el 12.7% por trabajo independiente (autoempleo), el 16% por transferencias. Las cifras anteriores indican que los salarios representan para las familias su fuente principal de ingresos y la fuente de su poder de compra, es decir la posibilidad de venta de las empresas.

De acuerdo con las Encuestas de Ingreso-Gasto de los Hogares (ENIGH), del 2008 al 2010 los salarios cayeron -2.3% en términos nominales (sin contar la pérdida del poder adquisitivo por la inflación) y del 2010 al 2012 solo crecieron 1.6%. El ingreso salarial mensual promedio de una familia de cuatro personas pasó de ser de 7 mil 116 pesos en 2008 a 6 mil 237 pesos en 2012, en términos constantes, esto es: descontando la inflación. El 70% de los hogares se apropió únicamente del 37% del ingreso nacional. Ello significa un bajo poder adquisitivo y un mercado interno deprimido.

Si a lo anterior agregamos que el 13% de los asalariados ganan un salario mínimo (s.m.), esto es 2 mil 018 pesos al mes en la zona A (principales áreas urbanas), el 24% de 1 a 2 s.m. (4 mil 036 pesos), el 22% de 2 a 3 s.m (6 mil 064 pesos) y el 15% de 3 a 5 (10 mil 090 pesos), nos daremos cuenta el por qué las ventas al menudeo de las principales tiendas departamentales han caído, y el por qué la confianza del consumidor se ha desplomado.

Para ser más gráficos el 46% de los asalariados gana menos de 196.74 pesos al día.

El otro asunto a considerar es que la fortaleza del mercado interno descansa en la clase media, cuyo poder de compra y capacidad de gasto es mucho mayor al de la clase baja y, en términos proporcionales a su ingreso, mucho mayor que la clase alta. La concentración del ingreso y la riqueza no favorece la expansión económica por el simple hecho de que no favorece las ventas. La población más rica no gasta en proporción a su ingreso lo que gasta la clase media, sin embargo para ser clase media tendremos que ganar entre 125 y 625 pesos diarios por persona (no por hogar), es decir entre 3 mil 750 pesos y 18 mil 750 pesos por persona al mes. Si las familias son en promedio de 4 personas ello significa un ingreso familiar mensual de entre 15 mil y 75 mil pesos mensuales. Eso, traducido a México, significa que la clase media está en el 20% de la población más rica del país, y el 80% restante es clase baja. La clase alta por su parte representa el 10% del 10% más rico de éste país.

De ahí la discusión para incrementar el salario mínimo. Los empresarios aluden que ello elevará sus costos de producción y con ello la inflación, pero la verdad es que lo que temen es que sus utilidades disminuyan, sin considerar que para tener utilidades deben vender su producción. La inflación no se elevará por una simple razón, tenemos una brecha de producto negativa, hay capacidad instalada ociosa en las empresas y no hay poder de compra. Un mayor salario reactivará la confianza del consumidor, las ventas y la producción. Al aumentar la productividad, los precios no tienen porque elevarse.

Un salario remunerador genera menor rotación de personal, lealtad y productividad, lo que en esencia es indispensable para reducir el costo unitario.

La discusión del salario mínimo no sólo es una obligación económica, es una obligación moral, es cuestión de equidad y de justicia.

JALISCO, INDICE DE ATRACTIVIDAD DE INVERSIÓN MANUFACTURERA: “TENEMOS QUE PONERNOS LAS PILAS”.

El incremento de los costos laborales en China, el aumento de sus costos de transporte, energéticos, logísticos y de inventarios han reducido sus ventajas competitivas como plataforma de exportación hacia Estados Unidos, ello ha provocado una relocalización de la inversión manufacturera buscando estar cerca de su mercado final (nearshorign), lo que abre una interesante ventana de oportunidad para México que, con la aplicación correcta de políticas públicas de promoción de la inversión, puede convertirse en un foco de atracción para las empresas que han decidido y están en proceso de salir de China para relocalizar sus actividades productivas (reshoring investment).

Se estima que el 54% de las grandes empresas transnacionales en China se moverán hacia Estados Unidos, y el 21% de éstas ya están reubicando su producción o la harán en los próximos dos años. El potencial de inversión reubicada se estima en 120 mil millones de dólares desde este momento hasta el 2020. Si dicha inversión llegará a ese país, tendrán en el 2020 una escasez estimada de 875 mil personas con habilidades especializadas para la operación de maquinaria.

Es por ello que se desarrolló el Índice de Capacidad de Atracción de Inversión Manufacturera (ICAIM) por parte del Centro de Investigación para el Desarrollo A.C. (CIDAC), pues se estima que México puede ser un fuerte polo de atracción para dichas inversiones y convertirnos en la mejor opción de atracción de inversión “The best nearshore option”.

La idea principal es que el gobierno a nivel federal y estatal inicie las medidas necesarias para que lo anterior sea una realidad, y generé la infraestructura y las políticas públicas de apoyo y promoción industrial necesarias que eleven la competitividad de las empresas y la regiones.

De acuerdo con el estudio, las industrias que tiene mayor capacidad de atracción son: electrodomésticos; computadoras y electrónicos; plásticos y hule; metalmecánicos, equipo de transporte, muebles, equipo eléctrico y equipo médico. Y lo más interesante es que ello coloca a Jalisco en una posición atractiva ya que dichos sectores son competitivos en nuestro estado.

De acuerdo al índice, Jalisco ocupa el 5° lugar nacional en atracción. El índice se evalúa con seis capacidades generales: servicios en parques industriales, expectativas de desarrollo, inseguridad de la región, respaldo institucional, competitividad y características de la región. El valor máximo del índice es de 100 y Chihuahua ocupa el primer lugar, mientras que Jalisco obtuvo un índice de 56.75. Como puede observarse a pesar de estar en 5º lugar la distancia es enorme con respecto al primero.

En lo que sí destacamos es en ciertos componentes del índice como por ejemplo, tenemos el primer lugar en acceso a agua potable, a fibra óptica, alumbrado público, sistemas de drenaje para aguas residuales, compañías exportadoras a Estados Unidos, mientras que en calidad de los servicios financieros ocupamos el 4º, expectativas de desarrollo futuro (5º), calidad de mano de obra especializada y no especializada (6º), calidad en la legislación tributaria local (6º), calidad en infraestructura de telecomunicaciones (7º), calidad en legislación laboral local (7º).

Pero aún tenemos muchos temas con mayor rezago en los cuales el gobierno estatal debe enfocarse y ellos son: vinculación empresas-universidades-centros de investigación y capacitación (15º), tasa de absorción de parques industriales (14º), capacidad de soporte institucional (13º), disponibilidad de subsidios y créditos para investigación y desarrollo (14º), requisitos legales para cierres y despidos (18º), políticas de promoción industrial (18º), políticas de urbanismo y vivienda (13º), servicios educativos (13º), entre otros.

Si queremos que Jalisco se convierta en polo de atracción tenemos que resolver estos problemas ya, dejar atrás los intereses políticos y la luchas de poder y centrarnos a realizar el trabajo para que antes de dos años tengamos resultados visibles.

Para aquellos que deseen consultar el estudio pongo la liga
http://cidac.org/esp/uploads/1/Reshoring_Mexico_2014_WEB_200514.pdf

POLÍTICA PÚBLICA Y CONCENTRACIÓN DEL INGRESO Y LA RIQUEZA

En su libro sobre “El Precio de la Desigualdad” (2012), Joseph E. Stiglitz establece que existen diversas razones que determinan cómo se distribuye el ingreso y la riqueza en la sociedad, entre ellas se destacan el desarrollo de habilidades, conocimientos y capacidades que el sistema educativo genera y que permite obtener un mejor salario para aquellos que no poseen activos (propiedades, empresas, y bienes en general). También influyen de forma determinante el empoderamiento de ciertos grupos y sectores de la población: sindicatos, partidos políticos, organizaciones sociales y civiles etc. que influyen sobre las decisiones de instituciones públicas en general para obtener parte de los beneficios del crecimiento económico.

En regímenes no democráticos, el gobernante expropia el ingreso y la riqueza de su población; el despojo también se logra con las guerras, las conquistas, la esclavitud y el exterminio de grupos sociales. Las dictaduras favorecen a ciertos grupos sociales en contra de otros y determinan dicha concentración.

En los regímenes democráticos, por su parte, es más importante el orden jurídico, el social y la forma de organización de la sociedad a través de sus leyes, reglamentos y normas en general. Pero lo interesante a destacar y que el autor permite leer entre lineas, es cómo la política económica en general y en especial la política social tienen un efecto determinante en dicha concentración.

La extrema liberalización de los mercados, la apertura externa, el proceso de globalización del comercio y los capitales, la des-sindicalización, las actividades de búsqueda de rentas, etc., todas son causa de la concentración del ingreso y la riqueza y dependen de las decisiones de la autoridad en materia de política económica y social.

La política fiscal en particular, que tiene que ver con las decisiones tributarias, de precios y tarifas públicas, de derechos, productos, aprovechamientos y contribución de mejoras, determinan dicha distribución, así como también la política de endeudamiento público y gasto público.

La asignación del gasto como gasto social, tiene entre sus objetivos prioritarios la redistribución del ingreso, pero existen otras actividades del gobierno que tienen un efecto mayor, focalizado y directo sobre dicho fenómeno tales como: transferencias, subvenciones ocultas y públicas por parte del gobierno; leyes que favorecen la concentración del poder económico y a los monopolios; patentes, ventas de activos estatales en condiciones ventajosas, ventas al gobierno a precios por encima de mercado, rescates bancarios y/o financieros de ciertos grupos que después se asumen como deuda pública y que constituyen en resumen un proceso de privatización de las ganancias y socialización de las pérdidas; bonos y compensaciones para directivos, diputados etc., desregulación de mercados financieros que permiten la usura, las comisiones bancarias excesivas y altas tasas de interés, etc.

A todo lo anterior hay que sumar las reformas estructurales, que al ser cambios institucionales en leyes, reglamentos y propiedad de activos, influyen definitivamente en la distribución de la riqueza, tales como la reforma energética, la reforma financiera, la reforma en telecomunicaciones, etc.

De acuerdo con el Wealth Intelligent Center en su documento “Number of Multi-millonaires in Mexico far Exceeds Global Avarage” (2013), para fines del 2012 había 145 mil millonarios en México, esto es el 0.12% de la población total, que concentraban el 43% de la riqueza total individual, cuando el promedio a nivel mundial es del 29%. Dichas personas concentraron 736 mil millones de dólares, mientras que el ingreso per cápita de un mexicano fue de 9 mil 640 dólares al año. De los millonarios 2 mil 540 son multimillonarios y se espera que, gracias a la Reforma Petrolera, para el 2017 dicha riqueza crecerá un 47% y el número de millonarios será de 213 mil personas, de las cuales 3,733 serán multimillonarios cuya riqueza crecerá en promedio un 44% para acumular 525 mil millones de dólares.

Carlos Salinas de Gortari fue un presidente que realizó un gran número de reformas económicas, y el que privatizó el mayor número de empresas paraestatales y bancos. De 1988 a 1993 el Estado transfirió al sector privado 50% de sus empresas de las cuales 18 eran instituciones financieras, mismas que se vendieron entre 1991 y 1992 y años después, con su rescate financiero, el Estado gastó dos o tres veces más del valor que obtuvo por su venta. En 1990 se privatiza Teléfonos de México (TELMEX), que era un monopolio, y se vende a un solo postor. En 1991 se privatiza Altos Hornos de México, Fundidora Monterrey y Siderúrgica Lázaro Cárdenas-Las Truchas, a un precio prácticamente regalado por un total de 755 millones de dólares frente a un capital contable de por lo menos 6 mil millones de dólares, según Emilio Sacristán Roy en su artículo “Las privatizaciones en México” (2006), y éstos son solo algunos ejemplos.

La cuestión es que con todo y su política de Desarrollo Social, el índice de Gini, que mide la concentración del ingreso se elevó del 0.43 al 0.48. Y el decil X, que representa al 10% de la población más rica paso de concentrar del 32% del ingreso nacional al 39%.

El problema es que la evaluación de la incidencia de la política fiscal sobre la distribución y redistribución del ingreso, la riqueza y por ende, la pobreza, se realiza sobre un universo muy pequeño de programas y políticas públicas dentro del marco del denominado gasto social y gasto fiscal, dejando de lado los efecto directos e indirectos que la política económica en general tiene.

OFERTA Y DEMANDA DE TRABAJO: UN EQUILIBRIO IMPOSIBLE

Un interesante documento del Boston Consulting Group de junio del 2014, denominado la “Crisis de la mano de obra mundial” nos hace reflexionar sobre la complejidad del problema laboral.

En el mercado de trabajo, el equilibrio entre la oferta y demanda de trabajo y por lo tanto de sus talentos, es más bien la excepción y tanto el exceso de fuerza de trabajo como su escasez generan serios problemas económicos.

Un exceso de fuerza de trabajo genera desempleo y subocupación, eleva la tasa de condiciones críticas de ocupación, de informalidad laboral y de presión laboral; disminuye los salarios nominales y destruye destrezas y conocimientos conforme se incrementa el tiempo en que la persona desocupada permanece en tal condición, sin contar los efectos psicológicos depresivos que el fenómeno produce. También erosiona la base tributaria con la reducción de los niveles de consumo de las familias y ventas de las empresas. Crecer económicamente es cada vez más difícil y la contracción del mercado interno se va retroalimentado.

La falta de empleo genera problemas sociales de desintegración familiar, vagancia, delincuencia, drogadicción y alcoholismo, lo que incrementa los costos de los servicios sociales y la necesidad de instrumentar políticas públicas de contención, lo que a su vez eleva el gasto social y presiona sobre el déficit fiscal y por tanto el endeudamiento público.

Los desempleados buscan actividades informales que generen ingresos, lo que paralelamente disminuye la productividad y paradojicamente incrementa el costo de la mano de obra, en términos unitarios. Las empresas buscan disminuir los costos laborales para mantener su rentabilidad lo que disminuye la calidad de los empleos otorgados y precariza aún más el mercado laboral. En conjunto estos elementos disminuyen la competitividad económica de un país, desincentivan la inversión productiva y por ende generan un menor crecimiento económico retroalimentando el problema.

Las políticas públicas se enfocan en re-adaptar la oferta de trabajo a las necesidades de le empresa, fomentar el emprendurismo, desmotivar la inmigración y fomentar la re-patriación de aquellos procesos productivos realizados en el exterior, combatir la informalidad y utilizar incentivos fiscales para la inversión productiva.

Por su parte la escasez de fuerza de trabajo (vacantes), encarece la mano de obra y reduce la rentabilidad de los negocios. Las empresas se ven obligadas a elevar su productividad mediante inversión tecnológica e innovación, la sub-contratación de procesos y el incremento de su competitividad. Ello genera nuevas necesidades de capacitación, adiestramiento y conocimiento de la mano de obra, presionando a las instituciones educativas a modificar programas de estudio y generar estudiantes con capacidades para ser empleados (empleabilidad).

Adicionalmente se genera inflación salarial lo que dificulta el crecimiento económico y entorpece los equilibrios de los otros mercados: materia prima, productos, capitales.

Otra serie de problemas relacionados con la demografía laboral se presentan: es necesario motivar la participación de la mujer en el mercado laboral, y la de las personas de la tercera edad. Las empresas se ven tentadas a incorporar fuerza de trabajo infantil con bajos salarios y sin prestaciones y la intensidad de las jornadas laborales se incrementa.

Como puede deducirse, tanto el excedente como la escasez de fuerza de trabajo dificultan el crecimiento económico, el problema es que el desequilibrio en el mercado laboral es más bien una excepción que una norma.

Como ya había establecido en un documento anterior, México tiene vacantes y desempleados, lo que genera una mayor problemática, pues ello significa que las empresas no pueden llenar las vacantes porque los trabajadores no tienen las habilidades ni capacidades que la empresa requiere, ¡a pesar de existir mano de obra disponible!. Esta brecha laboral es adicional al problema de exceso de fuerza de trabajo que es la diferencia entre cantidad de trabajadores disponibles y demanda de trabajadores por parte de las empresas e instituciones.

De acuerdo con el estudio, México tiene una población económicamente activa de 51 millones de personas en el 2012, y en el 2020 tendrá un excedente de 10 millones de personas que no encontrarán trabajo, dicho excedente crecerá a una tasa de 2.01% anual del 2012 al 2020, y del 1.2% anual del 2021 al 2030, a menos que incrementemos el emprendurismo y con él la producción y rentabilidad de las empresas, generemos empleabilidad en los jóvenes mediante el desarrollo de capacidades y destrezas y tengamos una política fiscal promotora de empleo e inversión productiva, el sector informal seguirá creciendo y con el la precariedad del empleo y la caída en la competitividad.

LA TASA DE INTERÉS Y CRECIMIENTO ECONÓMICO

La teoría económica convencional establece que una reducción en las tasas de interés generará crecimiento económico debido a que el empresario encontrará más rentable invertir en la producción de un bien que le dará una mayor ganancia, que depositar el dinero en una institución financiera para obtener a cambio un rendimiento.

Sin embargo los empresarios no toman decisiones en función únicamente de la diferencia entre el rendimiento financiero y la ganancia. Existen factores más importantes que inhiben la inversión productiva, uno de ellos es la expectativa sobre la venta futura de sus productos.

Cuando un empresario no espera vender el producto a producir, no invierte, a pesar de que tenga a su disposición un crédito bancario barato, o una cantidad abundante de mano de obra barata y materia prima.

Los empresarios saben de las dificultades que el proceso productivo conlleva: tratar con proveedores, trabajadores, distribuidores y clientes, son solo algunas de dichas dificultades, además deben manejar correctamente la contabilidad, lidiar con la competencia, con los impuestos y las medidas de seguridad social, ecológicas y fiscales en general que el gobierno establezca.

Una perspectiva pesimista sobre el crecimiento económico futuro –variaciones negativas en el producto interno bruto (PIB)- es más disuasiva que el efecto, tentativamente promotor, de una reducción de la tasa de interés de referencia del banco central.

Por otro lado la reducción de la tasa de referencia del banco central no es condición suficiente para la reducción de las tasas bancarias en el crédito para las empresas. Los bancos comerciales son renuentes a los riesgos y prefieren financiar al sector público: municipios, gobiernos estatales y dependencias gubernamentales, cuya deuda consideran más segura, que al sector privado. Por otro lado la rentabilidad del crédito de corto plazo canalizado vía tarjetas de crédito es mayor y el retorno de la inversión mucho más rápido.

Los bancos han encontrado en el cobro de comisiones, el pago por servicios financieros de administración de nómina, seguros diversos: vida, automóviles, etc., razones adicionales para perder el interés en el financiamiento a la producción. Incluso prefieren utilizar sus recursos monetarios en la compra de instrumentos financieros o de deuda pública que promete rendimientos de corto plazo, que esperar a recobrar la inversión de un proceso productivo cuyo periodo de maduración es mayor.

Por otro lado, el mercado interno deprimido, resultado de los bajos salarios, disminuye las ventas y tornan pesimistas a los consumidores, quienes deciden posponer sus decisiones de compras importantes para momentos mejores.

Así, el principal instrumento de la política monetaria deja de ser eficiente, y la tasa de interés objetivo o de referencia -aquella que esperan permita reducir el resto de las tasas bancarias- no ejerce el efecto esperado sobre las perspectivas de rentabilidad de la inversión productiva.

En ese momento se dice que la inversión productiva es inelástica a la tasa de interés y que por lo tanto se deben tomar otro tipo de medidas de política económica para reactivar la economía, entre las que destacan la mayor emisión monetaria para que presione al alza la inflación y ello motive a los consumidores a comprar hoy, o bien, el incrementar el gasto público en obras de infraestructura y el gasto social para reactivar sectores económicos específicos que a su vez generen un efecto multiplicador sobre otras empresas que operan como proveedores del gobierno.

Este es el panorama de la situación actual a nivel mundial y no sólo en México. La política monetaria ha perdido uno de sus principales instrumentos como resultado del escepticismo y debilidad de los mercados a nivel internacional.

EL BITCOIN ¿UNA MONEDA SEGURA Y CON FUTURO?

Artículo elaborado por Nora C. Ampudia y Lourdes Maisterrena

El Bitcoin es una moneda virtual generada a través de un software, es lo que denomina una moneda electrónica o digital también conocida como BTC. Es la moneda electrónica más utilizada en el mundo además de ser la precursora de las llamadas criptomonedas, que basan su respaldo en la criptografía, es decir, en algoritmos matemáticos difíciles de descifrar que pueden permitir brindar seguridad a las transacciones que se realizan.

Satoshi Nakamoto es el programador o es el seudónimo de los programadores que crearon el software de Bitcoin que está disponible pública y gratuitamente en la red desde 2009. Este software y sus monedas han tenido un importante éxito en el mundo virtual, y la forma de producir la moneda es a través de lo que se denomina la “minería”.

Los buscadores de bitcoin o “mineros” a través de sus computadoras y tarjetas gráficas, deben formar lo que llaman un “bloque” -aproximadamente cada 10 minutos se forma uno- y al hacerlo se les recompensa con 25 BTC. Entre mayor poder computacional se tiene, más posibilidades hay de formar el bloque, y para esto se han conformado grupos de minería que se denominan “pools” que unen su capacidad de cómputo para aumentar las probabilidades de obtener los bitcoin. Otra manera más sencilla de conseguir bitcoins es comprarlos.

El uso del bitcoin se ha promovido porque no se necesita de ningún intermediario para su uso, no se pagan comisiones, se pueden hacer pagos internacionales baratos, rápidos y fáciles; no es necesario proveer tu identidad para hacer transacciones; no hay una autoridad central que controle su precio y su oferta, o que rastree las operaciones que se realizan. Sin embargo no es una moneda con la que se pueda liquidar deudas bancarias ya que carece de respaldo legal y de respaldo en activos físicos.

Lo que muchos de los implicados con transacciones de bitcoin desconocen es que dicha moneda no es de curso legal, por lo que no se encuentra respaldada por un marco legal e institucional apropiado. En caso de un fraude ningún banco central acudirá al rescate, en pocas palabras no hay un prestamista de última instancia y por lo tanto no existe ninguna autoridad que lo respalde; su función como medio de pago no está garantizada y nadie puede obligar a aceptarlo como medio de pago.

Como toda moneda, la ampliación o reducción de su uso depende de la confianza y aceptación de la misma, y dicha confianza radica en la seguridad que el sistema virtual pueda garantizar para las transacciones y para los monederos electrónicos utilizados.

Por el anonimato que promueve, se ha encontrado que se ha utilizado en actividades ilícitas como fraude, narcotráfico, evasión fiscal y lavado de dinero.

Es necesario destacar que como moneda de cambio tiene un precio sumamente volátil, lo que la convierte en una moneda muy riesgosa para utilizarse como forma de ahorro o inversión. Dado que la moneda no tiene un valor facial, su precio puede llegar a cero.

La razón de la elevada variación en su precio radica en los siguientes puntos:

• La confianza: entre más aceptada sea esta moneda para compra-venta, más personas lo admitirán como medio de pago por lo que su precio aumentará, lo contrario será si se considera un medio de pago poco confiable.

• Su producción como moneda y disponibilidad, lo que sustenta su precio virtual.

En el mes de junio de 2014 un bitcoin equivalía a 672 dólares, cuando apenas un mes antes era menor de 450 dólares. A finales de 2013 su precio llego a ser mayor a 1000 dólares por moneda, y en sus inicios se llegó a vender en 10 centavos de dólar, lo que evidencia su volatilidad y lo riesgoso que es para considerarse una inversión.

En algunos mercados de bitcoin se han presentado ciertos problemas, el más reciente fue el caso de la casa de cambio de BTC: Mt. Gox, en Japón, que se declaró en quiebra por culpa de unos hackers que colapsaron su sistema.

También se ha sabido de importantes pérdidas de monedas en la red, además del mal uso que se le da en mercados ilegales.

Existen varios países que están prohibiendo el uso de esta criptomoneda, pero también hay muchos gobiernos que en realidad están interesados en regular este mercado, para evitar que haya evasión de impuestos. En cualquiera de los casos, ningún gobierno está dispuesto a respaldar dicha moneda en caso de un colapso.

El bitcoin resulta una moneda muy novedosa y que puede tener un importante impacto en la transacciones para compra-venta, además si las regulaciones que hagan los gobiernos con esta moneda resultan claras y fáciles de seguir se tendrá más confianza y probablemente aumenten el número de actividades comerciales que se realicen con criptomonedas, pero lo que debe quedar muy claro es que no reemplazará a una divisa, ni a una moneda de curso legal, como tampoco tiene el soporte institucional como el que tiene la banca comercial, sin embargo puede ser un incentivo para que los bancos se modernicen y abaraten sus formas de pago.

POBREZA Y RIQUEZA EN EL MUNDO Y EL MÉXICO DE LA DESIGUALDAD

La concentración del ingreso se ha incrementado persistentemente a partir de los 80´s del siglo pasado,tanto en los países desarrollados como en las economías en desarrollo, llegando a niveles similares a los obtenidos durante el siglo XIX, (Piketty, 2014), lo interesante a destacar es que dicho incremento se ha dado a pesar de las fuertes crisis económicas y las bajas tasas de crecimiento.

Si bien la desigualdad en la distribución del ingreso se ha acrecentado con los años, el desequilibrio es mucho mayor en el 10% de la población más rica, es decir en el decil X, donde el 1% de los más ricos (top o parte superior) ha incrementado su participación dentro del ingreso nacional.

Para determinar la magnitud del fenómeno bastan algunos ejemplos, en el caso de Estados Unidos, de 1981 al 2012 el 1% del 10% de la población más rica, incrementó su participación dentro del total de ingresos antes de impuestos del 8.2% al 19.3%, mientras que el 10% de la población más rica pasó de concentrar el 30% del ingreso nacional al 48%. En el Reino Unido el 1% de la población más rica, pasó de concentrar del 6.7% al 12.9% del ingreso nacional, en Canadá del 8.1% al 12.2%, en Australia del 4.8% al 9.2% y en Noruega del 4.7% al 7.8% (OECD, 2014).

Lo interesante a destacar es que si bien los más ricos de los ricos (1% del top) tienen fuertes pérdidas durante las crisis, se pueden recuperar rápidamente de ellas, mientras que la población que desciende hacia los primeros deciles (pobres) avanza con rapidez durante las crisis pero no mejora su situación durante las fases de expansión económica o la hace a un ritmo sumamente lento.

Por su parte la concentración de la riqueza también se ha incrementado sustancialmente y el índice de Gini es aproximadamente del doble con respecto al del ingreso (FMI, 2014, pág. 14), por su parte la riqueza financiera (bonos, acciones, pagarés etc.) está aún más concentrada que la no financiera (bienes inmuebles: casas terrenos).

De acuerdo con el reporte del 16 de enero del 2014 de Wealthinsight, existe un rápido incremento de millonarios en los países emergentes MINT (México, Indonesia, Nigeria y Turquía) así como también entre los miembros del BRIC (Brasil, Rusia, India y China); de 2013 a 2014 las tasas de crecimiento de millonarios fueron de: 22.6% en Indonesia, 17% en India, 10% en Nigeria, 9.5% en Estados Unidos, 8.9% en Brasil, 8.5% en Turquía, 7.9% en China, 7% en México, 6.6% en Reino Unido y 4.8% en Rusia. El mismo reporte llama la atención sobre el incremento que paralelamente se da en la pobreza en éstos mismos países (Wealth Intelligent Center, 2014).

Por su parte Capgemini, en su Informe Sobre la Riqueza en el Mundo del 2013 reporta un máximo histórico en la concentración de la riqueza, y espera que la riqueza de los multimillonarios crezca a una tasa anual del 6.5% llegando a los 55 mil 800 millones de dólares para el 2015. De hecho los millonarios comunes, aquellos que tienen de 1 a 5 millones de dólares crecieron a tasas del 9.1% del 2011 al 2012, mientras que su riqueza creció un 9.3%, en tanto los millonarios de nivel medio, aquellos que tienen de 5 a 30 millones de dólares crecieron respectivamente 10.1% y 10.2%, y los individuos de muy alto patrimonio, los ultra millonarios que tienen más de 30 millones de dólares fueron de 11% y 10.9%

Para el caso de México, a fines del 2012 había 145 mil millonarios, esto es el 0.12% de la población total, que concentraban el 43% de la riqueza total individual, cuando el promedio a nivel mundial es del 29%. Dichas personas concentraron un total de 736 mil millones de dólares mientras que el ingreso per cápita de un mexicano fue de 9 640 dólares al año en ese mismo año. De los millonarios, 2 mil 540 son multimillonarios y se espera que gracias a la Reforma Petrolera para el 2017 su riqueza crecerá un 47%, el número de millonarios será de 213 mil personas, de las cuales 3,733 serán multimillonarias cuya riqueza crecerá en promedio un 44% para acumular 525 mil millones de dólares (Wealth Intelligent Center, 2013. De 2007 a 2012, el número de multimillonarios creció un 19%.

Con respecto a la pobreza, el 21% de la población a nivel mundial vive en pobreza extrema según cifras del Banco Mundial, y su reducción es sumamente lenta; por ejemplo se espera una reducción de la pobreza extrema de apenas un 3% para el 2030. El mismo Banco establece que para alcanzar el objetivo de eliminar la pobreza extrema en el 2030 debemos reducir la pobreza a la mitad una vez, luego otra vez, y luego casi a la mitad por tercera vez, todo en el curso de una generación” (esto es 30 años) (Banco Mundial, 2013) Jim Jong Kim

En el caso de México el 45.5% de la población vive en pobreza, esto es 53 millones de personas y del 2010 al 2012 la pobreza se incrementó un 1%, mientras que de 2008 al 2012 dicho incremento fue del 7% de acuerdo con datos del Coneval. En materia de ingresos, la pobreza se ha incrementado como porcentaje de la población total desde el 2006 al 2012; la pobreza alimentaria creció del 14 al 19.7% del total de la población, la pobreza de capacidades pasó del 20.9 al 28%, y la patrimonial paso del 42.9 al 52.3%. De hecho de 1992 a la fecha, el número de pobres en las dos primeras apenas se ha reducido alrededor de un 2%, en tanto que la tercera ha disminuido 0.8%.

¿Qué hay detrás de éste fenómeno de concentración del ingreso?, de acuerdo con Joseph E. Stiglitz en su libro “El Precio de la Desigualdad”, son múltiples factores interrelacionados entre los que se destacan: a) El proceso político y la inequidad en la distribución del poder, donde importantes grupos e intereses económicos pagan las campañas políticas de diputados, senadores, gobernadores, presidentes municipales etc., para que acaben beneficiándolos mediante leyes, políticas públicas, subsidios disfrazados, concesiones, ventas de activos públicos a precios por debajo del mercado, puestos políticos, etc., y b) La acción de búsqueda de rentas (ingresos) como: bonos y compensaciones para los altos directivos, y bajos salarios y nulas prestaciones para los trabajadores; rescates de empresas privadas y bancos e instituciones financieras con los impuestos que paga la sociedad, precios de monopolio y oligopolio para los consumidores, y apropiación del excedente monetario de los consumidores mediante precios muy elevados que obedecen a la marca más que al costo del producto.

En lo personal creo que no está muy lejos de la verdad

FUERTE REZAGO DE CULTURA FINANCIERA EN MÉXICO

Nora C. Ampudia Márquez y Lourdes Maisterrena

Existen estudios que demuestran que el acceso al financiamiento puede ayudar a disminuir la pobreza, generar un mayor crecimiento económico y mejorar la distribución del ingreso. Si bien la inclusión financiera se convierte en la clave para el desarrollo económico, la cultura financiera es la piedra angular para mejorar las condiciones económicas de una familia.

El caso es que en México los dos problemas se conjugan, una baja penetración financiera y una escasa cultura en el conocimiento y buen uso de los productos financieros.

De acuerdo con el Banco Mundial en su estudio de inclusión financiera, el índice de inclusión financiera en México está muy por debajo del promedio de Latinoamérica y mucho menor al promedio mundial, de un valor de 1 para una total inclusión financiera, México tiene un 0.12 en 2010 y en 2005 tenía un 0.09, aun cuando el incremento es del 30% en cinco años, el avance es realmente limitado.

Comparado con otros países, el porcentaje de población mayor de 14 años que tiene una cuenta en una institución financiera formal es del 27% en México, 42% en Chile, 56% en Brasil y 89% en Estados Unidos. La población mayor a 15 años que utiliza medios electrónicos para pagar es de 8% para México, 11% Chile, 16% Brasil y 64% Estados Unidos.

En función del acceso a los servicios financieros de la población, ocupamos el 44vo lugar a nivel mundial con un índice de 2.96, muy por debajo del 5.53 de Suecia, el 4.73 de Kwait, el 3.82 de Perú y el 3.59 de Chile, según el Foro Económico Mundial.

Del total de la población adulta en México el 45% está excluido del sistema financiero formal, 50% lo utiliza de forma limitada y sólo 5% hace uso en su totalidad de los tres rubros más importantes: ahorro, seguros y créditos.

Según la encuesta nacional de inclusión financiera (ENIF 2012) apenas un poco más de la mitad de los adultos (56%) utiliza algún producto financiero y solo el 36% hacen uso de algún instrumento de depósito o ahorro formal a través principalmente de tarjetas de nómina (61%), ahorro (46.6%), cheques (6.1%) o depósitos a plazo (5.1%); en cambio el ahorro informal es utilizado por el 44% de la población y se da por medio del ahorro en casa o guardadito (28%), o mediante las denominadas tandas o rifas (14%).

En cuanto al crédito formal solo el 27.5% de los adultos las utiliza, de los cuales el 72% prefieren las tarjetas departamentales, que por cierto son las más caras del mercado en al menos un 10% más que el costo anual total (CAT) de las bancarias y en caso de incumplimiento, el nivel de riesgo de recibir una demanda por parte de la tienda es mucho más alto. Adicionalmente las autoridades financieras no tienen facultades para regular las tasas de interés de este tipo de tarjetas, ya que son del ámbito comercial y por lo tanto correspondería a la Procuraduría Federal de Consumidor y no a la Comisión para la Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros CONDUSEF.

A pesar de que las tarjetas bancarias son las más reguladas y tienen un CAT menor, solo el 33% de los adultos que utilizan el crédito las usa.

El crédito informal es utilizado por el 34% de la población adulta, a través de préstamos que dan los familiares (57%) y amigos (40%).

El crédito formal se destina primordialmente para remodelar o comprar una casa, también para gastos personales o inversiones en negocios, a diferencia del crédito informal que se destina a gastos personales, salud o educación y emergencias. Esta diferencia resulta relevante ya que se observa que las personas que tienen mejor cubiertas sus necesidades son las que hacen uso del crédito formal, mientras que las que tienen más carencias se limitan al crédito informal que además les genera mayores intereses.

Los seguros son un rubro que sólo se utilizan en el sector formal y solo el 22% de los mexicanos tienen uno, predominando el uso de seguros de vida (79%), para automóvil (33%) y gastos médicos (30%). Las barreras para usar estos servicios son el costo y el creer que no se necesitan.

En cuanto al ahorro para el retiro (AFORE) sólo 28% de la población cuenta con este sistema, lo que deja un amplio número de habitantes sin su posibilidad de uso para el futuro.

En México se ha visto la necesidad de que exista mayor participación en el sistema financiero formal, puesto que garantiza un mejor desempeño de la economía y un menor costo para los usuarios. Esto se ve complicado cuando los ingresos del 70% de la población son menores a $5000 pesos mensuales, pero es necesario buscar mecanismos que propicien la inclusión financiera, para generar mejores condiciones para todos.

BIBLIOGRAFÍA
Banco Mundial
http://siteresources.worldbank.org/EXTGLOBALFIN/Resources/8519638-1332259343991/N5lacSP2_08202012.pdf
BANSEFI
http://www.bansefi.gob.mx/sectahorrocredpop/patmir/Documents/Perpectivas%20Mx%20Inclusi%C3%B3n%20Financiera%20ACCION%20Int.pdf
Clavellina Miller José Luis.(2013). Crédito bancario y crecimiento económico en México, UNAM
http://www.economia.unam.mx/publicaciones/econinforma/378/02clavellina.pdf
Foro Económico Mundial. (19 de febrero de 2012). Reporte de Desarrollo Financiero 2012. http://www3.weforum.org/docs/WEF_FinancialDevelopmentReport_2012.pdf
INEGI
http://www.cnbv.gob.mx/Inclusi%C3%B3n/Documents/Encuesta%20Nacional%20de%20IF/An%C3%A1lisis%20Descriptivo%20ENIF%202012.pdf
Morfín Maciel, Antonio. (2009). Banca de desarrollo y el apoyo al acceso (México), CEPAL
http://www.eclac.org/publicaciones/xml/5/35665/lcl3007e.pdf

SECUESTRO DEMOCRÁTICO Y DESIGUALDAD SOCIAL : sobre el documento de la OXFAM

El problema de la concentración del ingreso y la riqueza tiene diversas facetas: una se relaciona con la concentración del ingreso con respecto al producto interno bruto medida a través de los ingresos laborales y las utilidades de los empresarios; otra se relaciona con la concentración de la riqueza medida a través de la tenencia de activos: bonos, inmuebles (casas, terrenos), obras de arte etc.; y una más se relaciona con la concentración de los ingresos del capital derivados de las inversiones en activos financieros.

El problema es que a nivel mundial dicha concentración, en todas sus manifestaciones, se ha ido elevando sustancialmente desde los años 80´s del siglo pasado, estrechamente relacionado con el retroceso de la participación del estado en la regulación económica y la ascensión del poder político de las élites, sin menospreciar el efecto negativo que el proceso de liberalización financiera y de apertura externa ha tenido.

Hoy el 1% de la población más rica a nivel mundial concentra el 50% de la riqueza, en tanto que el 99% restante concentra el otro 50%. De hecho la mitad más pobre de la población mundial posee la misma riqueza que las 85 personas más ricas del mundo.

Ésto es un fenómeno global sobre el que han llamado la atención tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI), como la Organización de Cooperación Económica para el Desarrollo (OCDE), la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) y el Foro Económico Mundial, entre otras instituciones internacionales, por los riesgos para la estabilidad económica y política que ello genera.

De hecho la desigualdad mundial se presenta como la segunda amenaza mundial de los próximos 18 meses, debido a los conflictos internos que ello puede ocasionar en materia de estabilidad política, y a los conflictos económicos relacionados con el debilitamiento del poder de compra de la población (débil mercado interno), su creciente necesidad de endeudamiento (fragilidad financiera) y su consecuencia inmediata: la desaceleración económica o recesión.

Muchos de los conflictos político-sociales recientes a nivel mundial se encuentran íntimamente ligados a la injusticia social, la concentración de la riqueza y el ascenso de la pobreza, y México no es la excepción.

Recientemente la OXFAM, una organización global de lucha contra la pobreza publicó su 178 informe denominado “Gobernar para las Élites: secuestro democrático y desigualdad económica (http://www.oxfam.org/sites/www.oxfam.org/files/bp-working-for-few-political-capture-economic-inequality-200114-es_0.pdf). En dicho documento se pone de manifiesto como se ha ido incrementando la desigualdad económica en función del secuestro de los procesos democráticos por parte de élites económicas con la influencia política necesaria para mover los hilos de la política fiscal, monetaria y financiera a su favor.

El documento establece que de no controlarse dicho fenómeno se creará un monopolio de oportunidades controlado por el sector más rico de la población cuyos hijos reclamarán los impuestos más bajos, la mejor educación y atención sanitaria, y dichos privilegios se heredarán de generación en generación.

El documento ofrece ejemplos sobre como los efectos de la desregulación financiera, la inequidad de la política fiscal y las políticas económicas de austeridad impuestas ante la crisis financiera han favorecido el incremento de la pobreza y la desigualdad social.

Esto aún puede revertirse, con una política de participación ciudadana, una fiscalidad más progresiva, la búsqueda de condiciones laborales dignas y empleos de calidad, así como la ampliación de los servicios públicos y la protección social. A lo que habría que sumar la auditoria de los procesos políticos y las cámaras de los representantes que deben tener la obligación de rendir cuentas a la ciudadanía, como lo debe hacer cualquier funcionario público.

REMESAS EN JALISCO: INGRESOS Y GRADO DE DEPENDENCIA

Artículo escrito por Nora C. Ampudia y Lourdes Maisterrena

Las remesas en nuestro país constituyen la segunda fuente de divisas después de las exportaciones y son más importantes que los recursos derramados por el sector del turismo, sobrepasando incluso a la inversión extranjera directa en los últimos diez años.

Muchas familias y gobiernos municipales, incluso a nivel estatal, dependen de dichas remesas de forma importante. Para el caso de Jalisco en el 2013 ascendieron a 1 807 millones de dólares (Banxico) y es la tercera entidad en el país que recibe más remesas, representando el 8.3% de la participación nacional superada sólo por Michoacán (10%) y Guanajuato (9.5%).

En los últimos diez años hemos mantenido el tercer lugar como estado receptor de remesas con un grado de intensidad alto que sin embargo ha ido disminuyendo, ya que durante el año del 2000 ocupábamos el 7° lugar como expulsor de población y para el 2010 pasamos al 13° lugar.

La Inversión Extranjera Directa (IED) también ha sido un factor determinante para la economía estatal, en el 2012 recibimos 772 millones de dólares en IED, monto similar a los ingresos por remesas en el estado en dos trimestres, sin embargo la cantidad que llega de IED es mucho más fluctuante que la de las remesas y han sido pocos los años, como el 2010, en los que la IED fue mayor a los ingresos recibidos por remesas.

Por la desaceleración en la economía estadounidense, las remesas en Jalisco se vieron reducidas durante algunos trimestres, los principales sectores en los que los mexicanos trabajan en Estados Unidos son el de hotelería, esparcimiento, construcción y manufacturero, como estos se vieron afectados por la recesión, las remesas también cayeron. Para 2013 se han recuperado estos ingresos pero sin alcanzar los niveles anteriores a 2009.

El índice de dependencia de remesas del estado (remesas como porcentaje del PIB) también ha venido disminuyendo, pero no de forma notable, durante el 2003 era de 3.0 y para el 2010 fue de 2.8 y de 2.6 para 2012, mientras que para Guerrero fue del 14.6, Michoacán 9.6 y Oaxaca 9.4 (Anuario de Migración y Remesas 2013, Fundación BBVA-Bancomer)

Para darnos una mejor idea el PIB del comercio en Jalisco representó el 21.4% del PIB, seguido de la industria manufacturera con 19.6%, mientras que las remesas representaron 2.6% del PIB, cifra menor al sector agrícola que fue 5.6%. Aun así los migrantes Jaliscienses mandan a sus familiares un aproximado al 50% del valor de la producción agrícola.

Entre más productiva sea una entidad, menor peso tendrán las remesas sobre su economía así aunque Jalisco sea el tercer estado de mayor recepción de remesas, el porcentaje que representa con respecto a su PIB no es de los mayores.

El problema con las remesas es la subordinación que se puede generar a la economía de Estados Unidos además de que el establecimiento de segundas generaciones de mexicanos en el país vecino no asegura que se sigan enviando las remesas a futuro.

Para las comunidades más marginadas los efectos de la migración han sido adversos, la fuga de la población joven y la pérdida de potencial productivo no se compensa con el envío de remesas, sin embargo en las zonas menos marginadas los efectos son positivos pues las remesas han permitido elevar los niveles de consumo de la población, aún así la mayor pérdida se relaciona con la fractura del entorno familiar, la pérdida de fuerza laboral y la llamada fuga de cerebros o capital humano.

BIBLIOGRAFÍA

BBVABANCOMER
http://www.bbvaresearch.com/KETD/fbin/mult/1312_SitMigracionMexico_Dic13_tcm346-415273.pdf?ts=2132014

BANXICO
http://www.banxico.org.mx/politica-monetaria-e-inflacion/material-de-referencia/basico/fichas-sobre-politica-monetaria-e-inflacion/analisis-economico/%7BA692F93E-CAE3-C053-80E7-3322C7930F91%7D.pdf
http://www.banxico.org.mx/SieInternet/consultarDirectorioInternetAction.do?accion=consultarCuadro&idCuadro=CE100§or=1&locale=es

COEPO
http://www.conapo.gob.mx/work/models/CONAPO/intensidad_migratoria/pdf/IIM_Estatal_y_Municipal.pdf

JAPÓN Y CHINA: UNA PARADOJA


Artículo Escrito por Nora C. Ampudia y Lourdes Maisterrena

Los problemas económicos no se viven igual en todas partes.

Las dos grandes economías asiáticas han vivido escenarios distintos y tienen características particulares, pero han llamado la atención por ser economías con gran posicionamiento a nivel mundial y por su volumen de comercio.

En las últimas décadas se han enfrentado a contradicciones importantes, por un lado Japón ha vivido en deflación por más de 20 años, con empresarios sin motivación para invertir, ya que la disminución generalizada de los precios no estimula la producción, mientras tanto su población prefiere ahorrar y esperar que bajen los precios. Según el Banco Mundial, de 1998 a 2012, Japón ha tenido una tasa de crecimiento económico promedio de 1.1%, mientras que China en ese mismo periodo ha crecido en promedio 9.8% y es considerada la segunda economía del mundo, desplazando a Japón al tercer lugar.

A pesar de ello, en Japón esta situación de estancamiento y deflación prolongada no afectado a la población como uno podría esperar, la calidad de vida sigue siendo elevada y la pobreza no ha avanzado. Por su parte China, con un crecimiento económico sobresaliente y baja inflación, no ha logrado ampliar su clase media, la pobreza sigue siendo una constante y la desigualdad social se incrementa.

No obstante el alto crecimiento económico de China durante más de 30 años, no ha logrado un incremento en su consumo, el cual representa sólo 36% de su PIB, mientras que el consumo de los japoneses representa 60.9% del PIB, lo que indica una menor dependencia del mercado externo.

En China su PIB per cápita es apenas de $9,100 dólares, casi cuatro veces menor que el japonés, y su índice de desarrollo humano es de 0.69 , ocupando el lugar 101 a nivel mundial. Por su parte Japón tiene un PIB per cápita de $35,900 dólares, muy superior al promedio mundial, y un índice de desarrollo humano de 0.91, ocupando el 10° lugar a nivel mundial, lo que muestra que su población vive con grandes comodidades.

Con respecto a la concentración del ingreso, China tiene un índice de Gini de 0.47 para 2012 ocupando el lugar 29 a nivel mundial lo que indica una importante desigualdad de ingresos, mientras que en Japón el índice de Gini es de 0.37 para 2008, es decir, posee una mejor distribución del ingreso que China y ésta es precisamente la razón por la cual el estancamiento de la economía Japonesa no se ha traducido en un incremento acelerado de la pobreza y un deterioro de la economía en general.

Una mejor distribución del ingreso logra que los efectos negativos de una desaceleración, recesión o crisis sean menores y la población mantenga un mejor nivel de vida. En pocas palabras, la crisis no se vive igual en todos lados, siempre afectará negativamente y en mayor medida a las economías que tengan una alta concentración del ingreso.

Las raíces de éstos resultados se encuentran en el desempeño económico a lo largo de los años. El crecimiento económico de Japón, después de la segunda guerra mundial, generó un mayor nivel de vida para sus ciudadanos y una gran capacidad de compra.

En la actualidad y gracias a la política que se conoce como Abeconomía, propuesta por el primer ministro japonés Shinzo Abe, se ha buscado la reactivación de la economía japonesa por tres vías: la primera mediante la impresión de dinero por parte del Banco Central, lo que disminuye la tasa de interés, desestimula el ahorro, estimula la inversión productiva y consecuentemente eleva el consumo de la población a la par que el yen se deprecia esperando reactivar las exportaciones y elevar su competitividad a nivel internacional.

La segunda mediante el aumento del gasto gubernamental para ejercer efectos multiplicadores sobre la economía y la tercera mediante el estimulo a la inversión productiva y la generación de empleos.

China, por su parte, inicia su periodo de auge con las reformas económicas que cambiaron sus políticas de desarrollo transformándose en lo que se denomina socialismo de mercado. En 1980 empieza a incursionar en los mercados internacionales con un panorama de estabilidad macroeconómica interna, bajo déficit fiscal y baja inflación, lo que le permitió impulsar su comercio exterior y en el 2001 entra a la Organización Mundial de Comercio. Los bajos costos en sus materias primas y las condiciones financieras mundiales previas a la gran recesión, lograron que China se consolidara, sin embargo la crisis financiera internacional del 2008-2009, más las dificultades económicas enfrentadas por sus principales socios comerciales afectaron su economía lo que genera un rápido proceso de desaceleración.

Japón pasó de periodos de alto crecimiento a más de dos décadas con deflación y muy bajas tasas de crecimiento, pero su estabilidad económica no se ha resquebrajado por completo debido a que el gobierno siempre se ha preocupado por disminuir la desigualdad en los ingresos.

China por su parte tiene treinta años con altas tasas de crecimiento, pero gran pobreza y desigualdad social, por lo que ese crecimiento no se ha visto materializado en una mejora de la calidad de vida para todos. En estos últimos años han buscado robustecer su mercado interno para mejorar las condiciones sociales.