El
Banco Interamericano de Desarrollo, en su publicación: “¿Cómo impactará el
COVID-19 al empleo?, ha hecho algunas proyecciones sobre la pérdida estimada de
empleo en tres escenarios de crisis.
Establece
que es muy difícil pronosticar la duración y profundidad de la crisis por la
cantidad de factores que se presentan, algo totalmente inusual:
a)
Desaceleración económica mundial,
b)
Guerra comercial,
c)
Guerra de precios (petróleo)
d)
Tendencia a la precarización laboral
e)
COVID-19.
Aunque
el BID no lo menciona en México debemos agregar:
a)
Crisis de confianza (caída inversión privada),
b)
Crisis de seguridad (abrazos no balazos),
c)
Crisis en el sector salud (precipitación en la eliminación del Seguro Popular
para pasar al INSABI, sin haber hecho un escenario de transición),
d)
Escenario de desaceleración económica desde el año pasado.
e)
Escaso margen fiscal (caída en recaudación, no creación de nuevos impuestos, no
incremento de deuda pública)
f)
Política de austeridad.
Por
ello, requerimos una política de apoyo al empleo, diferenciada para economía
formal e informal, y por sector de actividad económica.
Los
subsidios de sus programas sociales no son ni serán suficientes.
Sin
duda debemos tolerar un mayor déficit fiscal: deuda pública
https://publications.iadb.org/publications/spanish/document/C%C3%B3mo_impactar%C3%A1_la_COVID-19_al_empleo_Posibles_escenarios_para_Am%C3%A9rica_Latina_y_el_Caribe.pdf
No hay comentarios:
Publicar un comentario