¿POR QUÉ GANÓ DONALD TRUMP?

El modelo neoliberal esta haciendo agua, a nivel mundial las tasas de crecimiento económico son históricamente bajas, 2.5% en 2015 contra 6.5% en 1976 (Banco Mundial) y los países desarrollados son los que menos crecen con una tasa de 2.1%, mientras que Estados Unidos solo creció un 2.6%, el problema es que para este 2016 y 2017 el crecimientó de dichos países será todavía menor 1.6% en 2016 y 1.8% en 2017 (FMI) en especial para Estados Unidos que se encuentra en un claro proceso de desaceleración económica que se acentuará los siguientes dos años con pérdidas de crecimiento estimadas en -0.6 en 2016 y -0.3 en 2017, y eso sin tener en consideración quién ganaría las elecciones.

Por su parte, la desigualdad económica y la concentración del ingreso y la riqueza se elevan de forma permanente, las salarios en términos nominales y reales se reducen y los mercados laborales se muestran precarios. La desigualdad salarial se incrementa dentro de las empresas y entre regiones económicas, así un administrador general puede quintuplicar e incluso ganar de diez a doscientas veces más que lo que gana el obrero del más bajo nivel.

Lo que esta siendo claro incluso para el Fondos Monetario Internacional (FMI), la OCDE y el World Economic Forum, es que algo anda mal, y que éste modelo neoliberal ha favorecido a los poderosos y es momento de empoderar a la población para revertir la situación pues a mayor desigualdad menor crecimiento económico y bienestar.

Lo que aún no quieren ver es que el libre mercado no lo es tanto cuando el poder económico y político se impone. Los ricos tienen la fuerza política y monetaria suficiente para cambiar las leyes a su favor y modificar las condiciones de competencia económica, y esa libre competencia permite reducir los costos y permitir que las ganancias se acumulen en favor de los accionistas y los directivos del más alto nivel. En pocas palabras el liberrímo mercado opera a favor de la concentración a través del mismo mecanismo que se ha considerado como el más eficaz para distribuir los recuros, la libre oferta y la libre demanda.

En el informe de OXFAM (2016): "Una economía para el 1%", se establece que 62 individuos en el mundo concentran la misma riqueza que 3 mil 600 millones de personas ¡la mitad más pobre en el mundo!; y mientras que para los primeros su riqueza creció un 45% del 2000 al 2015, para los segundos disminuyó un 38%, así el 50% del incremento en la riqueza a nivel mundial fue apropiado por el 1% de la población más rica, y de los ingresos generados a nivel mundial el 46% fue apropiado por el 10% más rico, y ésto mismo esta sucediendo en Estados Unidos, país en el que la desigualdad se ha elevado de forma persistentes desde los 80's.

Hoy los capitales y los especuladores imponen sus condiciones a los mercados internacionales, fluyendo de un lugar a otro para obtener la máxima ganancia, vendiendo y comprando acciones para garantizar su riqueza, pasando del oro a la plata, del cafe al petróleo etc., manipulando precios y tasas de interés para despues ubicarlos en paraísos fiscales que permian garantizar la mayor acumulación posible de capital y aportar lo menos posible al gasto público y por ende en su principal objetivo, la distribución de los ingresos y la riqueza.

Aunque la inflación se mantiene también en niveles históricamente bajos, el poder adquisitivo de la población no se incrementa precisamente porque los salarios se deterioran, las personas no sienten una mejoría en su bienestar social y necesitan escuchar las promesas que les garanticen una mejora económica, mejores empleos, mejores salarios y mejores servicios públicos, eso es precisamente lo que Donald Trump les prometió.

Los que votaron por el, son el sector menos culto de la población, pero el más necesitado del cambio, y también el sector más conservador, los blancos que quieren volver a los viejos tiempos: un Estados Unidos fuerte, con rápido crecimiento económico al que se le denominó el "Sueño Americano", aquel que hablaba de igualdad de oportunidades, en el que todos podían lograr sus objetivos, tener una vida cómoda y tránquila con sus necesidades satisfechas. A eso apostó Trump, y eso fue lo que lo llevó a la victoria, aunque sus propuestas económicas no sean coherentes, aunque ello implique mayor xenofobia y discriminación, las razones del voto no fueron éstas últimas, sino la primera "volver al sueño americano"