EL TEMOR A LA INFLACIÓN

La inflación es siempre un dolor de cabeza, si es alta porque distorsiona la asignación de recursos, deteriora el poder adquisitivo del dinero y con ello el consumo de la población, impide hacer planeación financiera, desintegra el ahorro e incrementa la concentración del ingreso; y si es muy baja porque puede caer en un proceso deflacionario (caída en precios) y por lo tanto de contracción económica, alto desempleo, crisis e inequidad en la distribución del ingreso.

Hoy México tiene la tasa de inflación más baja a nivel histórico desde que los precios comenzaron a medirse a nivel nacional en 1969. En parte podría ser resultado de la política monetaria y las reformas estructurales implementadas en este gobierno como la energética, la de comunicaciones y la financiera, pero la razón principal es que, a nivel mundial estamos viviendo una caída de precios de bienes comercializados internacionalmente (commodities) lo que ha generado las inflaciones más bajas de la historia a nivel mundial, a excepción de aquellos países que presentan severos problemas económicos y políticos como: Brasil, Argentina, Egipto, Rusia, Nigeria, Ucrania y Venezuela entre otros pocos.

De acuerdo con el Inegi, la inflación anual en México fue del 2% en la primera quincena de diciembre, y un incremento quincenal de solo 0.26%, el año pasado en la misma fecha los datos fueron de 4.19% y 0.41%.
Estos bajos niveles inflacionarios tiene como parte de la explicación la caída de los precios internacionales del petróleo como el Brent del Norte que en tres años ha reducido su precio en un 65.8% y el gas natural con una caída del 39.1% y de muchos otros commodities como el cobre con caídas en el mismo período de 40.9%, e incluso el oro con 35.3% menos, café con -19%, maíz -47.4%, trigo -39.8% y azúcar -29.7% (http://mx.investing.com/commodities/).

Como podemos observar, son bienes y servicios claves en el consumo de la población e insumos para la producción, y son resultado básicamente de un problema de exceso de oferta, o reducción de demanda, que para el caso es lo mismo “generación de excedentes”, pero cuyas causas pueden ser distintas, pues un exceso de oferta puede ser resultado del incremento de la productividad y la eficiencia en los procesos productivos, mientras que una caída de la demanda puede ser resultado del empobrecimiento de la población que devenga bajísimos salarios reales a nivel histórico; o bien un incremento en la concentración del ingreso que implica que los más ricos gastan proporcionalmente menos ingreso que los más pobres y los productores no venden todo lo que producen.

La realidad es que a nivel mundial existe esta peligrosa tendencia a la deflación que muestra la existencia de un mercado deprimido. Independientemente de su causa, hay un exceso de productos en los mercados a nivel mundial y que obedece en parte al incremento en la productividad y eficiencia de los procesos productivos y en parte al incremento en la desigualdad social y la concentración del ingreso, lo que genera una demanda efectiva insuficiente para hacer subir los precios.

Por ello los países más desarrollados han permitido y promovido el incremento en los salarios mínimos reales (descontando inflación) como Alemania que por primera vez lo introduce, Estados Unidos 13.59%, Corea del Sur 13.1%, Reino Unido 10.22%, y China 13%, entre otros.

En este punto es importante distinguir entre el incremento al salario nominal (sin considerar inflación) y al real (considerando la inflación), porque países como Venezuela y Argentina han tenido que elevar el salario tratando de compensar la pérdida del poder adquisitivo generado por sus elevadas tasas de inflación, el primero en 42.5% y el segundo en 20.7%, sin embargo el incremento sigue siendo negativo en el sentido que no compensa el incremento en precios (es decir el incremento en términos reales es negativo). En estos casos sus salarios van siguiendo a la inflación debido a su baja productividad y crisis económica lo que genera un efecto de retroalimentación, ↑inflación →↑salario→↑inflación, lo que provoca una espiral hiperinflacionaria y hoy son de los países con mayor inflación a nivel mundial.

Y ese es precisamente el temor a la inflación, por el cual los gobiernos temen incrementar los salarios mínimos, porque ello puede acarrear mayores presiones en costos de producción y por ende en precios de venta, generando la inflación. Sin embargo las hiperinflaciones se generan en escenarios de baja productividad, proteccionismo exagerado para los productores nacionales y gobiernos populistas. Los países con incrementos en su productividad, innovación tecnológica y desarrollo de nuevos productos y mercados no deben temer a la inflación.

INCREMENTO DE TASA DE INTERÉS DE LA RESERVA FEDERAL, IMPACTO EN MÉXICO

La tasa de interés es uno de los instrumentos más poderosos que tiene un banco central para influir en la actividad económica de un país. El banco central es el emisor de dinero de curso legal y lo inyecta al sistema bancario mediante subastas de créditos a la banca comercial, así la banca obtiene los recursos monetario para luego prestar al público o a otros bancos (crédito interbancario), y las familias, empresas y gobierno pueden obtener créditos bancarios para lograr sus objetivos de adquisición de bienes y servicios, inversión productiva, viajes etc.

La tasa de interés de referencia es la tasa a la que el banco central (en nuestro caso Banco de México) subasta créditos a la banca comercial, y la tasa objetivo es la tasa de interés de corto plazo que predominará en el mercado y que definitivamente depende del nivel que determine el banco central. Sobre ella se fundamentarán los costos para financiar crédito hipotecario, tarjeta de crédito, crédito automotriz, de avío, refaccionario, etc.

Cuando la Reserva Federal eleva su tasa de interés está ofreciendo un mayor rendimiento lo que atrae inversionistas de todo el mundo. Aquellos países que ofrezcan menores rendimientos o menores tasas de interés verán salir los recursos monetarios de sus economías y los capitales fluirán hacia los Estados Unidos, éste país verá apreciar su moneda (dólar), mientras que el resto de los países que no muevan sus tasas verán depreciar sus monedas.

En la economía norteamericana se aumentarán los niveles de ahorro, reduciendo el consumo de las familias, disminuirán los rendimientos de los proyectos de producción financiados con recursos bancarios, por lo que la inversión productiva disminuirá; las personas con deudas en tarjeta de crédito, y por lo tanto a tasa de interés flexible, verán incrementarse su deuda y tendrán problemas de liquidez, todo ello desacelerará a la economía norteamericana generando menor crecimiento económico y empleo. Por ello el movimiento en la tasa de interés de referencia debe ser moderado, cauto y pausado, de lo contrario se podría generar una recesión.

De ahí que la Reserva Federal solo haya subido ¼ de punto porcentual su tasa de referencia, al pasar de 0.25% a 0.50%, y a pesar de tan moderado incremento, veremos efectos a nivel global.

Para el caso de México, el Banco de México tendrá que subir también su tasa de referencia o de lo contrario habrá salidas de capital, sobre todo de aquellos inversionistas que trajeron sus capitales de forma masiva para aprovechar los mayores rendimientos que generaban tasas mucho más elevadas que las norteamericanas, ya que aquí la tasa de referencia era de 3%. Mientras ello duró, y el precio del petróleo se mantuvo, el peso se apreció, pero ahora la fiesta termina y a menos que mantengamos los rendimientos competitivos, habrá vuelo a la calidad lo que depreciará aún más el peso, moviendo las expectativas de rentabilidad de los proyectos de inversión y posponiendo decisiones de empleo, construcción, producción, viajes al extranjero etc.

El problema es que la economía mexicana muestra ya claros signos de desaceleración, el efecto de incrementar la tasa de referencia se magnificará en el resto de tasas de interés, especialmente en las relacionadas con los créditos revolventes y los agentes económicos endeudados verán aumentar sus deudas, disminuir su liquidez y posponer sus decisiones sobre el uso del dinero, y ese no será el impacto total, si la economía norteamericana entra en desaceleración, nosotros lo haremos en mayor magnitud debido a nuestra estrecha dependencia en relación a las exportaciones, la inversión extranjera, las remesas, el turismo y las importaciones de materia prima y tecnología, éstas últimas pueden impactar los costos de producción generando un incremento en precios.

La Reserva Federal sabe del impacto global que su decisión ocasiona, por ello es muy seguro que el incremento en tasas de interés sea muy pausado. Economías grandes han presionado al respecto (Alemania, Francia, Italia, Japón, Canadá y Gran Bretaña) para concertar un movimiento de tasas pausado e incluso dicho incremento podrá ser revertido si la economía Norteamericana se desacelera y apunta hacia la deflación.

JALISCO: MEJOR DESEMPEÑO ECONÓMICO QUE EL PROMEDIO NACIONAL



Jalisco es una economía con un alto grado de integración al mercado internacional, fuertemente dependiente de un solo mercado, pero con productos de exportación diversos y en sectores no maduros con gran capacidad de innovación y crecimiento económico a futuro, esa diversidad genera menor vulnerabilidad a los ciclos económicos así como mayor empuje al crecimiento y generación de empleos.

Si se suman las exportaciones (X) más las importaciones (M) y se dividen entre el Producto Interno Bruto (PIB), se obtiene el grado de apertura externa, en el caso de México a diciembre del 2014 dicho grado era del 69%, mientras que para Jalisco fue del 145% ¡el doble que a nivel nacional! ello nos hace más dependientes del dinamismo de la economía internacional.

El 78% de las exportaciones se dirigen a un solo mercado: Estados Unidos y 52.5% son de un solo sector: el electrónico. En el caso de México el 81.7% de las exportaciones son hacia ese mercado, ello provoca que cuando el sector industrial en Estados Unidos se desacelera, en Jalisco el efecto se magnifica provocando una caída mayor que a nivel nacional.

Una gran ventaja es que Jalisco ha reducido fuertemente su déficit comercial, que medido como porcentaje del PIB pasó del 30.2% en 2007 al 8.3% en 2014, ello nos hace menos vulnerables a la escasez de divisas, pues el resto de los sectores generadores aportan una buena cantidad al mercado cambiario local, para el caso de México la cifra pasó de 1.8% a 1.1% en esos años.

En nuestro estado, un equivalente al 36% del PIB lo generan sectores que aportan divisas, 29.3% por exportaciones, 1.7% el turismo de extranjeros, 3.1% las remesas y 1.9% la inversión extranjera directa. Ello significa que el equivalente a un tercio de la riqueza generada está atada al sector externo y se ve fuertemente impactada por el nivel del tipo de cambio, lo que nos hace vulnerables en épocas de recesión internacional, pero nos fortalece conforme el peso se debilita ante el dólar pues genera competitividad por precio.

De acuerdo con el Instituto de Información Estadística y Geográfica de Jalisco (IIEG), por cada 1% que crece el PIB en Jalisco genera 8 mil 220 millones de pesos, y en los últimos cuatro años la participación en la generación de riqueza nacional se ha ido incrementado persistentemente.

Desde el 2010 crecemos por encima del promedio nacional con una diferencia a nuestro favor de 0.6%. Se nos considera un estado de alta complejidad económica, ocupamos el 4º lugar nacional en sectores precursores del crecimiento económico y el 9º en competitividad exportadora aun cuando solo el 1.5% de las empresas jaliscienses exportan.

De acuerdo con KPMG Jalisco es una de las tres entidades preferidas por los inversionistas en 2015 y lo seguirá siendo durante 2016 y 2017, y si redujéramos los costos de exportación en tan solo 1%, las exportaciones aumentarían un 2.6%.

Tal como lo dije el año pasado en la Cámara de Comercio con respecto a las expectativas para el 2015 crecimos por encima del promedio nacional durante el primer semestre, 1.5% más y esos datos se mantendrán durante el segundo semestre y durante el 2016.

Lo único que podría generar un efecto negativo sería una fuerte desaceleración en la producción automotriz y el sector manufacturero en Estados Unidos, así como la profundización de la deflación a nivel internacional.

CÓMO CONSTRUIR UN PATRIMONIO

El patrimonio es el conjunto de bienes que posee una persona y que pueden ser susceptibles de tener un valor económico, dichos bienes garantizan tu bienestar, tu salud e incluso tu felicidad, en pocas palabras el patrimonio es riqueza.

Para construir un patrimonio lo primero que necesitamos es tener nuestras finanzas personales en orden, lo que supone gastar menos de lo que se gana, con ello se puede generar un ahorro destinado a la creación de riqueza, para lo cual debes tener claro el monto total de tus ingresos y tu patrón de gastos.

Para lograr el punto anterior debes tener un presupuesto diario, en el que anotes tus ingresos y el cómo serán distribuido día con día, analizando con cuidado que gastos puedes disminuir, cuáles evitar y cuáles son estratégicos para ir construyendo tu patrimonio.

Todos podemos ahorrar, aunque pensemos que para ahorrar hay que ganar más, la realidad es lo opuesto, para ahorrar hay que gastar menos. Incluso las personas más humildes pueden generar un patrimonio, tienen estrategias financieras que les permite sobrevivir día a día con sus magros ingresos y superar la adversidad, las compras en abonos, los microcréditos, el micro ahorro son elementos presentes en su vida diaria. Realizan actividades diversas para generar ingresos extras, planchar, lavar, cocinar para otros, hacer mandados etc.

Si necesitas un ingreso extra, analiza tus capacidades y determina que otro tipo de actividades te pueden generar un ingreso adicional: cuidar niños, cuidar enfermos, cocinar para vender, dar clases de matemáticas, inglés, piano, en el gimnasio etc., todos tenemos habilidades para generar mayores ingresos.

El segundo punto es establecer una meta de ahorro y determinar tu ahorro semanal, dicho ahorro debe ser del 10% de los ingresos, si es posible un poco más. Debe estar contemplado en tu presupuesto como si fuera un gasto, para no disponer de él. Muchas personas separan dicho ingreso desde el principio de la quincena y lo depositan en una cuenta, así no podrán disponer de él, pero cuidado dicha cuenta debe tener una tasa de interés mayor a la inflación.

Tercer punto, determina qué tipo de patrimonio deseas construir: un terreno, una casa, un auto, un curso de especialización que a su vez te permitirá mayores ingresos a futuro, poner un negocio etc. Comenzar por una casa es siempre una buena opción, no se deprecia con la facilidad de un auto o cualquier otro bien y te garantiza un techo seguro por si acaso enfermaras, perdieras el empleo, tuvieses una incapacidad etc.

El cuarto punto es proteger el patrimonio lo que supone asegurarlo ya sea tu coche, tu casa, tu vida y principalmente tu salud.

El quinto punto es ser disciplinado y determinado, el ahorro no se toca, no se destina a consumo superfluo: una nueva bolsa, un nuevo par de zapatos, un adornito para la casa. El ahorro debe ser un hábito, es decir permanente.

Sexto punto, determinar que el dinero debe trabajar para nosotros y no nosotros para el dinero, lo que supone gastarlo de forma inteligente e invertirlo para que genere más. La inversión del dinero debe ser con conocimiento, bien asesorados e informados sobre riesgos, rendimientos y tipos de instrumentos. Si vas a poner un negocio que sea sobre algo que conoces, nunca sobre algo novedoso sobre lo que no tienes experiencia ni idea alguna, infórmate sobre los rendimientos esperados pero también sobre los riesgos existentes.


Por último es importante tener un testamento que garantice que tus herederos recibirán el patrimonio que tanto trabajo ha costado construir sin disputas, procesos legales desgastantes y costosos.

AGUINALDO: GASTARLO CON SABIDURÍA CONSTRUYENDO RIQUEZA

El dinero es una de las cosas que más deseamos pero que valoramos poco, en el sentido de que no siempre sabemos cómo gastarlo de forma que nos beneficie y no nos perjudique, porque gastarlo debe tener un sentido y un buen propósito.

Gracias al dinero podemos adquirir bienes necesarios, podemos ahorrar para un mayor consumo futuro, para enfrentar imprevistos o para asegurar una vejez sin carencias. Podemos invertirlo para que trabaje para nosotros o bien destinarlo a ayudar a los demás.

En pocas palabras el dinero es el medio que nos permite adquirir riqueza, entendiendo como riqueza la abundancia de bienes con alto valor monetario y constituida por activos patrimoniales como inversiones, propiedades, activos financieros etc., una persona rica tiene excedentes para pasear, viajar, ahorrar y darse gustos que la mayoría no puede darse.

El dinero no es en sí mismo riqueza, pero es el medio por excelencia para obtenerla, nuestros ingresos nos proveen del dinero necesario, y utilizarlo con sabiduría puede generar riqueza que a su vez genere mayores ingresos, generando un círculo virtuoso de ingreso, riqueza, ingreso.

No se trata de gastar para consumir, sino de gastar para generar y la clave está, en primer lugar, en realizar un diagnóstico de gasto, es decir determinar mis pautas de consumo, definir si gasto demasiado en cosas que no me permiten aportar a un patrimonio, en pocas palabras si mi gasto es improductivo o productivo, ya que malgastar el dinero significa desperdiciarlo, sin un propósito claro y correcto, sin considerar metas o necesidades futuras, sin analizar si aporta a mi bienestar futuro.

El gasto realizado para satisfacer deseos o caprichos es un gasto 100% improductivo, no quiero decir que de vez en cuando no gastemos en un buen restaurante, un buen vino, adornos para la casa etc., pero recuerde que la suma de dichos gastos va mermando la posibilidad de invertir en algo que genere más ingresos.

El gasto hormiga, esas pequeñas sumas de dinero que destinamos a papitas, dulces, café, propinas, dádivas etc., se van acumulando semana tras semana hasta juntar cantidades considerables que pueden representar por sí solas el enganche de un auto, una cantidad respetable para destinar a un fondo de inversión etc.

Recuerde que el factor común a toda crisis: personal, familiar, empresarial, municipal, estatal y nacional es que se gasta más de lo que se gana, por ello la regla número uno es nunca gastar más de lo que tienes, elaborar un presupuesto en el que uno de los rubros sea el ahorro.

La regla número dos es analizar tu gasto y determinar si es productivo, es decir si te aporta algo: educación, salud, auto, casa, en pocas palabras patrimonio, ello supone hacer un diagnóstico de tu gasto anotando durante un mes todos tus desembolsos, por más insignificantes que sean, para poder determinar qué gastos pueden ser reducidos, cuáles pueden ser evitados y evaluar de qué tamaño es tu gasto hormiga para convertirlo en un acelerador de ahorro e inversión.

La regla número tres es determinar si estas gastando de forma inteligente, es decir si usas el dinero para adquirir un patrimonio que además de garantizar una vida tranquila te permita generar un fondo de ahorro que ayude a enfrentar un imprevisto (despido, enfermedad, defunción, etc.,) o te apoye para generar un monto suficiente para poner un negocio, realizar una inversión financiera o aporte recursos para el retiro, es decir vivir una vejes tranquila.

Regla número cuatro que la búsqueda de generación de riqueza no cancele hoy tu bienestar.

El dinero nunca sobra y por lo tanto no debe gastarse tan pronto como se recibe, es también un medio para capitalizarlo, ello significa que se multiplique así mismo mediante una inversión bien hecha, para la cual estemos asesorados por las personas correctas e invertirlo en una institución segura. Por ello debemos tener claras nuestras metas, determinar las prioridades e irlo asignando a satisfacer cada una de ellas, de ahí la regla número cinco: determina tus metas, tu estrategia financiera y el tipo de patrimonio que deseas construir lo que supone tener planes financieros para el futuro.


No hagas compras por impulso, no hagas compras innecesarias, no seas un consumista vanidoso, inviértelo en instrumentos seguros, define tus metas financieras y sobre todo regla número seis determina correctamente tu capacidad de endeudamiento, se disciplinado, programa tus pagos, no acumules deudas a meses sin intereses sin una correcta planeación y destina algo para tus vacaciones, ya que el reposo siempre repercute en salud, paz y tranquilidad.

EL YUAN EN EL SISTEMA MONETARIO INTERNACIONAL: CHINA HACE LA TAREA

Para que una economía globalizada opere con fluidez a nivel internacional se requiere que los intercambios comerciales puedan realizarse sin dificultad, ello significa que se puedan liquidar las importaciones de bienes, los préstamos internacionales, las compras de activos financieros: bonos de deuda, acciones, obligaciones, etc., así como la compraventa de divisas; por lo tanto en el mundo debe existir la suficiente liquidez (medios de pago) para saldar las deudas, así como la suficiente confianza en el valor de las monedas y la determinación de sus paridades.

Dado que cada país tiene su propia moneda, esta debe ser convertible en otras y garantizar que es lo suficientemente estable para mantener su poder adquisitivo de forma que sea aceptada como medio de pago, liquidación o financiación.

Así el sistema monetario internacional debe contar con las condiciones monetarias y financieras que faciliten el ajuste ante eventos catastróficos como terremotos, huracanes de gran impacto, sequías, guerras, etc., problemas de depresión en los precios de los commodities como por ejemplo: la caída del precio internacional del petróleo; y eventos de contagio de crisis financieras, cambiarias, de deuda y económicas en general a nivel internacional.

Ello supone la coordinación y el establecimiento de medidas internacionales que posibiliten la consecución de créditos en otras monedas que permitan liquidar deudas, respaldar activos y reconstituir reservas internacionales. De ahí la creación, en 1969, de los Derechos Especiales de Giro (DEG), que sin ser una moneda, es un activo de reserva internacional creado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), apoyado por una canasta de monedas, con el objetivo de apuntalar el sistema de paridades fijas vigentes hasta entonces, de forma que un país puede obtener la divisa que requiere y le es escasa a cambio de su disposición en DEGs, ya que los puede canjear por dichas divisas, los puede vender o puede tomar créditos usándolos como respaldo. Así los DEG operan como activos de reserva complementarios a las tenencias en oro y a las reservas internacionales que poseen los bancos centrales.

El valor del DEG está basado en una canasta de divisas que hasta hoy consta de cuatro monedas de amplio uso internacional: el dólar, el euro, el yen y la libra esterlina, y a partir de octubre del 2016 entrará el yuan o renminbi chino.


De acuerdo con el FMI el yuan cumple con los criterios necesarios para formar parte de la cesta de monedas por ser de amplio uso internacional en operaciones de comercio exterior y financieras, y China ha trabajado perseverantemente en ello, por eso tiene 39 acuerdos de intercambio de divisas con el mismo número de países, ha mejorado el acceso de los extranjeros a su mercado cambiario ampliando sus horarios y ha logrado negociar bonos soberanos de deuda en las Bolsas de Frankfurt y Londres. En pocas palabras el yuan tiene el volumen de operación necesario para clasificarse como moneda de libre uso que además se negocia extensamente en función del volumen de comercio internacional y en los principales mercados de divisas.

INFLACIÓN DISFRAZADA

En ésta semana la inflación presentó un nuevo mínimo histórico al ubicarse en 2.27% anual, es decir con un incremento de tan solo 0.52% en la primera quincena de noviembre. Los precios de las mercancías se incrementaron 0.12% mientras que los precios de los servicios se redujeron 0.10%. Lo anterior es resultado de un decremento en los precios de los servicios de telefonía móvil, de los productos para el cabello, el papel higiénico y los pañuelos desechables, la gasolina de bajo octanaje y el gas doméstico natural, también influyó la reducción en el precio del huevo, jitomate, pan dulce, melón y pescado.

El que los precios al consumidor disminuyan sin duda significa que el poder adquisitivo del dinero se incrementa, sin embargo existe en todo esto un fenómeno oculto a la vista del consumidor y al que le denomino la “inflación disfrazada”, ésta se presenta cuando el productor no puede trasladar al precio de venta el incremento en sus costos de producción por temor a perder el mercado por un incremento en la competencia. La mayor competencia puede ser resultado de una reducción de costos de sus competidores, la importación de productos sustitutos con menores precios o un mercado interno deprimido que a su vez implica una reducción del consumo de su producto.

De esta forma los productores deben bajar la calidad del producto o el contenido del mismo, así observamos bolsas de papas fritas con más aire y menos papas, latas de atún con más agua y menos atún, botellas de aceite de a litro con solo 900 o 950 mililitros, paquetes de papel higiénico con el mismo número de royos pero cuyas hojas son más delgadas, cajas de cereal del tamaño de las de un kilo, pero con 950 gramos, o botellitas de chile en polvo del mismo tamaño pero con la base sumida hacia adentro para tener menor contenido, entre otras estrategias utilizadas para hacernos creer que estamos comprando lo mismo por el mismo precio.

Aunque los productores nos informan del contenido en las etiquetas, no cambian el tamaño de la caja, lata o bolsa, y los consumidores que no tienen la costumbre de checar el peso neto, drenado o contenido, creen que están comprando la misma cantidad de producto al mismo precio que antes.

De lo que no estoy muy segura es de si el INEGI y el personal encargado de levantar la información quincenal también se darán cuenta de estos pequeños trucos.


El análisis del índice de precios al consumidor (INPC) y el del índice de precios al productor de bienes intermedios (insumos para producir) (INPPi) nos muestra que de marzo a julio de éste 2015 el INPPi ha sido mayor al INPC, lo que indica que los productores no han podido trasladar el precio de venta el incremento en sus costos de producción, así como tampoco el efecto de la depreciación del peso sobre el costo de los insumos importados para la producción, por ello el productor ha tenido que reducir sus costos de producción de diversas maneras: disminuyendo calidad, disminuyendo contenido o disminuyendo salarios, prestaciones, bonos etc., también existe la posibilidad de que este disminuyendo su margen de utilidad, pero ello es más difícil de creer pues la existencia misma de la empresa depende de la obtención de utilidades tanto para los accionistas en las grandes empresas, como para los propietarios de las micro y pequeñas empresas.

MÉXICO: MUCHO COMERCIO EXTERIOR POCO CRECIMIENTO ECONÓMICO

México ha firmado 11 tratados de libre comercio con 46 países, 9 acuerdos de complementación económica y de alcance parcial, y 32 acuerdos para la promoción y protección recíproca de las inversiones (Secretaria de Economía), pero a pesar de ello y desde 1993, el 84% de las mismas van hacia un solo destino, Estados Unidos de Norteamérica, por lo que no hemos sacado provecho a tantos acuerdos.

De acuerdo con datos del INEGI, desde la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) las exportaciones han crecido un 414% y las importaciones un 503%, muy por encima del crecimiento económico del país, lo increíble es que este crecimiento del comercio internacional ha sido posible aún cuando no contamos con suficientes vías férreas y líneas de ferrocarril, ni flota marítima propia capaz de movilizar tanta mercancía y a pesar de que el 80% del trasporte se realiza por carretera con elevados costos no sólo del trasporte mismo sino también por el costo de peaje. Ello sin contar los problemas de lógistica que enfrentan las empresas y que se concentran en los costos de envío, la velocidad en las aduanas, las normas de seguridad y los riesgos de pérdida y daño en Mercancías de acuerdo con el estudio de UPS "Las Exportaciones en México, Desafíos y Oportunidades 2015"

En México el comercio exterior aporta de forma significativa al crecimiento económico del país. Las exportaciones pasaron de representar el 15% del PIB a fines del 1993 al 36% en el segundo trimestre del 2015, mientras que las importaciones pasaron del 13% al 34% en esas mismas fechas. Hoy el volumen de comercio exterior (exportaciones más importaciones) es del 70% del PIB lo que indica un fuerte grado de apertura externa y una fuerte dependencia del sector externo.

De acuerdo con la Organización Mundial de Comercio, a nivel mundial ocupamos el 15º lugar por el volumen de nuestras exportaciones y el 14º por el volumen de nuestras importaciones, cada rubro genera el 2% del total mundial.

Diversas investigaciones establecen que el comercio exterior dirige el crecimiento económico de un país, el Banco Mundial establece que a mayor proporción del volumen de comercio exterior, con respecto al PIB, mayor es la tasa de crecimiento económico en el largo plazo.

Un estudio de Domingo Rodríguez y Francisco Venegas-Martínez establece que en México el crecimiento de las exportaciones explican en parte el crecimiento del PIB (http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1870-66222011000100004), a pesar de ello dicho crecimiento no se traduce en un mayor dinamismo económico, y las razones son variadas, las más importantes se encuentran relacionadas con la enorme concentración del volumen de comercio exterior en un número pequeño de empresas, el papel de la industria maquiladora de exportación y la inexistencia de cadenas de valor nacionales que suministren lo insumos necesarios a los exportadores.

Así tenemos que en el sector manufacturero, que genera el 86% del total de las exportaciones, solo un pequeño número de empresas el 21.6%, esto es 1 262 empresas, constituido por las macro-empresas, acapara el 87% del valor total de las exportaciones, el 13% restante se reparte entre empresas grandes y medianas con el 7% y el 5% respectivamente, el 1% restante lo realizan las pequeñas y microempresas (INEGI, 2015 “Perfil de las Empresas Manufactureras de Exportación”)

Por otra parte el 75% de los insumos para los productos de exportaciones son importados, ello impide la generación de cadenas de valor nacionales y por lo tanto proveeduría nacional que pueda generar efectos multiplicadores sobre las empresas mexicanas y derrama económica sobre el tejido empresarial mexicano y su población.

Ello significa que a pesar de tener un lugar relevante en las exportaciones a nivel mundial, no se generan efectos de arrastre que puedan promover la inversión nacional, la generación de empleos y de ingresos para la población.



JALISCO AVANZA

A nivel Nacional Jalisco ocupa el 4º lugar por el tamaño de su economía y se encuentra en la zona centro-occidente, zona que tiene la mayor contribución al crecimiento económico del país aportando 0.56 puntos porcentuales a dicho crecimiento. Ésta zona genera el 31% del PIB nacional y en ella se encuentran los estados que tienen las mayores tasas de crecimiento en los últimos tres años y son: Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco, Querétaro y San Luis Potosí, quienes conforman un corredor industrial que ha generado sinergia para la región en su conjunto.

Lo que nos diferencia del resto de los estados de la zona es la diversificación de nuestra actividad económica, la amplia variedad de las exportaciones, el creciente capital humano y el tamaño del mercado interno, lo que nos hace menos vulnerables al ciclo económico.

El mercado interno de Jalisco se ha ido fortaleciendo al reducir el porcentaje de la población en pobreza laboral del 30% al 28.8% en el segundo trimestre del 2015. La tasa de pobreza salarial es significativamente menor que la nacional, 29.3% contra el promedio nacional de 42.7%, y lo anterior es resultado de varios factores entre ellos: a) La disminución de la tasa de informalidad de 47.9% a 47.2% quedando por encima del promedio nacional, b) El incremento en la creación de empleos formales ya que, en lo que va de éste año, hemos cumplido la meta en un 89% y hemos logrando cubrir el 100% de los empleos necesarios para los jóvenes que se incorporan por primera vez al mercado laboral c) La mejora en la distribución del ingreso con un índice de Gini de 0.345 por debajo del promedio nacional que es del 0.398. (México ¿Cómo Vamos?: ¿Cómo Reducir la Pobreza en México, Reporte Economías Estatales 2º trimestre 2015).

En el 2012 el área metropolitana de la ciudad de Guadalajara generó 77 400 millones de dólares y nos colocó como un núcleo económico de gran relevancia en América Latina, es decir nos posicionó en el 11º lugar. Somos un polo de desarrollo en tecnologías de la información, tenemos oferta de proveeduría para la industria aeroespacial, para la automotriz, en dispositivos médicos, en el sector eléctrico, electrónico y electrodoméstico, y en la industria de la animación digital.

Contamos con importantes empresas exportadoras de productos farmacéuticos, autopartes, bebidas y alimentos, etc. En el sector agropecuario nos destacamos en la producción de pollo, huevo, carne de cerdo, maíz así como en la producción y exportacion de berries (frambuesa, zarzamora, arándano y fresa). Somos líderes nacionales en la producción de arándanos con el 55% del total nacional.

Nuestras exportaciones representan el 26% del PIB, por encima del promedio nacional que es del 23.7% y el 69% de lo que exportamos son productos manufacturados de sectores que aún muestran fuerte dinamismo económico a nivel mundial y un ciclo de vida de los productos aún en ascenso o en innovación continua.

En materia de productividad también hemos avanzado con un incremento por encima del promedio nacional, y hemos logrado reducir la deuda pública al pasar de 2.6% al 2.3% del PIB estatal.

Tenemos una canasta de exportación diversificada que genera una menor vulnerabilidad a los ciclos internacionales y la inversión extranjera sigue arribando al estado buscando ventajas competitivas, de localización y capital humano, además de aprovechar la ubicación estratégica del estado. 

En menos de dos años hemos sido sede de eventos internacionales de gran importancia, que permiten posicionarnos a nivel global y son "El Foro Internacional de Políticas de Bienestar y Desarrollo", El "5º Foro Mundial sobre Estadísticas, Conocimiento y Políticas" de la OECD, "La Cumbre de Negocios", "Outsortce2LAC 2015" y por realizarse el "Foro Internacional de Innovación en la Gobernanza Metropolitana" del 23 y 24 de noviembre.

Todo lo anterior nos muestra que seguimos avanzando aunque aún tenemos importantes rezagos en materia de comunicaciones, necesitamos urgentemente vías férreas que faciliten la transportación de mercancía del Puerto de Manzanillo al resto del país así como mejorar las vías de comunicación existentes para que de forma eficiente reduzcan costos y tiempos de movimientos de las mercancías en especial con el corredor industrial de Guanajuato, Querétaro, Aguascalientes y San Luis Potosí.
Necesitamos desarrollar un puerto seco, favorecer la movilidad urbana e invertir mucho más en transporte público subterráneo.

ESTAMOS VIVIENDO LA SEXTA EXTINCIÓN

La extinción es la desaparición de organismos vivientes como consecuencia de la pérdida de su hábitat, depredación o incapacidad para adaptarse a los cambios de su entorno. Una especie se considera extinta cuando muere el último individuo de ésta. Las causas de las extinciones son variadas: cambio climático y ecológico, desastres naturales: glaciaciones, sequías, actividad volcánica en exceso, cambio del campo magnético, explosión de supernovas, caída de meteoritos.

En la historia de este planeta ha habido cinco grandes extinciones de seres vivos. La primera hace 444 millones de años, en la transición del período Ordovícico-Silúrico: se extinguieron 100 familias biológicas que equivalían al 85% de las especies de fauna existentes, la duración del proceso fue de aproximadamente un millón de años; la segunda fue hace 370 millones de años, en el período Devónico y se extinguieron el 70% de las especies y el 22% de las familias a lo largo de 3 millones de años. La tercera fue hace 251 millones de años, en la transición del período Pérmico-Triásico, desaparecieron el 90% de las especies. La cuarta fue hace 210 millones de años, en la transición del Triásico al Jurásico y desaparecieron el 20% de las familias marinas lo que permite que los dinosaurios dominen. La quinta fue hace 65 millones de años, en la transición del Cretácico al Terciario cuando se extinguen los dinosaurios y desaparecen 70% de las especies (https://bibliotecadeinvestigaciones.wordpress.com/ecologia/las_5_extinciones_en_masa/).

La sexta extinción abarca del período Holoceno a la actualidad, inició hace 13 mil años y se ha venido acelerando recientemente. Cada año desparecen ante nuestros ojos de 30 mil a 50 mil especies de vida: vegetales, hongos, musgos, bacterias, animales: insectos, mamíferos, peces etc., y se estima que a ese ritmo en el año 2050 se habrá reducido a la mitad el número de especies.

Hoy día el 25% de los mamíferos a nivel mundial se encuentra amenazada, el 33% de los anfibios, una de cada siete aves, 25% de los corales, el 16% de los cangrejos, entre otros, de acuerdo con “El Estado de las Especies en el Mundo” (https://cmsdata.iucn.org/downloads/2008_red_list_factsheet_sp.pdf)

Los científicos están de acuerdo que la causa de la actual extinción es la actividad depredadora del hombre y estamos en un punto del camino ya sin retorno, y de no tomar conciencia y actuar rápidamente y de forma drástica estamos cancelando nuestro propio futuro, “el hombre se extinguirá por la acción del hombre”.

No es solo un problema de contaminación, es un problema de depredación contra la naturaleza: desertificación, deforestación, erosión, degradación de suelos, contaminación, explotación excesiva de especies: hongos, musgos, bacterias, vegetales y animales, agotamiento de recursos, nutrientes, mantos freáticos, minerales etc.

Otro gran inconveniente es que no tenemos el conocimiento suficiente para entender cómo funcionan los ecosistemas y como interaccionan las especies de forma que no podemos recrearlos y mantenerlos funcionando de acuerdo con el documento de Biodiversidad de la SEMARNAT (http://www.semarnat.gob.mx/archivosanteriores/informacionambiental/Documents/05_serie/yelmedioambiente/3_biodiversidad_v08.pdf)

Lo peor de todo es que lo ignoramos o no lo queremos ver, y al hacer caso omiso de ello no luchamos por detener el fenómeno. No nos hemos planteado con seriedad y compromiso ¡qué estamos haciendo para evitarlo! y no como sociedad sino de forma personal. ¿Qué hago yo en mi casa, trabajo, ciudad, para evitarlo? ¿Qué acciones mías aportan a la extinción? ¿Cómo debo actuar para no favorecer el fenómeno?, ¿Qué hecho para tomar conciencia de ello?. En cosas tan simples como qué consumo, cuánto consumo y para qué consumo. Si utilizó detergentes no biodegrables, químicos para la limpieza, insecticidas, repelentes, pinturas, alimentos procesados, ¿cómo me transporto? ¿cuánta energía consumen mis electrodomésticos? ¿cómo cuido mi jardín? o el parque de la colonia, los árboles, fuentes, etc.

Cada actividad nuestra tiene un impacto ambiental y una poco considerada es el consumismo no es sustentable ni ecológica, ni financieramente.


Lo invito a reflexionar y hacer reflexionar a sus familiares, amigos, vecinos. ¡Solo hay un planeta habitable en éste sistema solar y lo estamos agotando!

EN RIESGO DE DEFLACIÓN MUNDIAL



Muchas personas piensan que la deflación es buena, porque un decremento en los precios le da mayor poder adquisitivo a su dinero y por tanto abaratará su consumo, sin embargo esto no es así, la deflación es un fenómeno más peligroso que la inflación.

La deflación significa que el incremento en los precios es negativo, es decir están por debajo de cero como puede observarse en la Gráfica No. 1.

Durante la deflación los precios de mercado disminuyen, pero no así los costos de producción, los márgenes de utilidad de las empresas se contraen y con ello la producción, el empleo, los ingresos y el consumo, lo que invariablemente nos lleva a una crisis caracterizada por una contracción de la producción y del mercado interno.

A nivel mundial la inflación ha disminuido de forma notable y ha llegado a niveles peligrosamente bajos, a esto los economistas lo llamamos el filo de la navaja, pues estamos a un paso de la deflación y por ende de un proceso de contracción económica severa.

De acuerdo con estadísticas del Banco Mundial y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), los países desarrollados a nivel mundial presentan niveles históricamente bajos de inflación, tan bajos que están a un paso de la deflación.

Desde un punto monetarista, la deflación surge cuando existe una escasez de dinero, las personas no tienen para gastar y los precios caen. Lo más curioso es que hoy este fenómeno deflacionario se da en medio de una gran liquidez internacional, producto de la política monetaria acomodaticia que los principales bancos centrales del mundo han aplicado, inyectando dinero a la circulación para reactivar la demanda, la inversión, la producción y el empleo (Ver segunda Gráfica).

Por otro lado la corriente principal “Neoliberal” diría que es un problema de sobreoferta, difícil de creer en un mundo con caída en la inversión productiva, bajas tasas de interés y capacidad instalada ociosa.

Los Keynesianos lo ven como un problema de Demanda Efectiva que plantea que hay un bajo consumo por parte de la población que puede ser explicado por un deterioro de las expectativas del consumidor o bien por su bajo nivel salarial y elevadas tasas de desempleo.

Desde mi punto de vista es un problema de corte Keynesiano relacionado adicionalmente con la concentración del ingreso y la riqueza, que genera un bajo poder adquisitivo de amplios sectores de la población cuyos niveles salariales son insuficientes, no poseen riqueza real en sentido estricto: propiedades, autos, electrodomésticos, etc., pero es muy probable que tengan un elevado endeudamiento y sigan pagando en mensualidades dichos activos. En estricto sentido la riqueza no es de su propiedad.

La corriente principal de pensamiento económico (neoliberalismo + nuevo consenso) establece que el Banco Central debe tener como objetivo prioritario el combate a la inflación, de esa manera coopera al crecimiento económico y el bienestar social. Sin embargo a nivel mundial, y México no es la excepción, hemos llegado a bajísimos niveles de inflación, y ni el crecimiento económico, ni el bienestar social se alcanzan.

El debate que hoy se está llevando a nivel mundial es sobre la prioridad que la política económica: fiscal y monetaria debe tener: ¿empleo o inflación?

Promover mejores salario, salarios remuneradores que permitan adquirir bienes para que las empresas realicen ventas y tengan la motivación suficiente para invertir y crear empleos, o luchar por una inflación baja. El problema es que en el esquema convencional, el salario siempre acaba perdiendo, debido a que su incremento elevará los costos de producción y reducirá las utilidades y la producción. Sin embargo sin salarios remuneradores no habrá ventas a menos que se eleven los créditos y con ellos el endeudamiento de la población creando fragilidad financiera.

Es necesario destacar que no es lo mismo financiar el consumo con ingresos derivados de la actividad económica que financiarlo con créditos, el primer caso es sustentable, el segundo no, lo que a futuro generará invariablemente, crisis bancarias y financieras.


El debate está en marcha, los pasos se están dando. Hoy los gobiernos se preguntan si medir el crecimiento a través del incremento en el Producto Interno Bruto, realmente mide el bienestar social. Se están planteando alternativas para tener en consideración el sentir de las personas en cuanto a su bien-estar, la felicidad, el equilibrio ecológico y la salud.